Sofía Suescun ha conseguido revolucionar las redes sociales con un nuevo vídeo en el que muchos de sus de seguidores aseguran que podría haber dado posibles pistas sobre un posible embarazo. A pesar de que la propia influencer y su pareja ya han manifestado en alguna ocasión su firme intención de convertirse en padres, parece que todavía no han encontrado el momento. Sin embargo, un nuevo vídeo en el que Sofía tiene el vientre al descubierto ha hecho saltar nuevamente todas las alarmas.
"Me voy de cenita con outfit check incluido", ha escrito la joven en la publicación donde se la puede ver vistiéndose y arreglándose frente al espejo del baño. Y es justo a través del espejo donde se puede ver la cintura que algunos se han molestado a analizar con todo detalle. "¿Es cierto que está embarazada?", pregunta una usuaria. Mientras que otra destaca abiertamente que "le ve cintura de embarazo" y asegura que "cuando el río suena, agua lleva y les pega ya ser papás, la verdad".
Por el contrario, y como respuesta a todos aquellos que insisten en apuntar que podría estar en la dulce espera, Sofía Suecun ha subido a sus stories unas imágenes donde se ve una copa de vino. De hecho, le están sirviendo la copa y lo único que se ve es una mano sosteniéndola, que bien es cierto que podría pertenecer a cualquier otra amiga. Esta podría ser una prueba muy clara de que puede beber y, por tanto, no está embarazada.
Justo en medio del revuelo que se ha formado ante estos crecientes rumores, lo cierto es que la reacción que han tenido Sofía y Kiko Jiménez también resultaba de lo más llamativa, ya que ambos optaban por subir un vídeo en el que aparecían dando volteretas. "Sale la supuesta noticia que está embarazada y ella haciendo piruetas! Me súper encanta!", comentaban sus seguidores en la publicación.
Ajena a todos estos rumores, sobre los que Suescun aún no se ha pronunciado, la hija de Maite Galdeano sigue intentando reponerse de la complicada situación que ha vivido con su madre. Una guerra familiar de la que hemos sido testigos durante semanas, y que ha terminado con la influencer marcando distancia con su madre, a la que ha acusado de haber intervenido en su vida privada y manipularla durante años.
Cansada, tanto Sofía como su pareja Kiko decidían dar un golpe en la mesa y distanciarse de Maite, con la que actualmente no quieren mantener ninguna relación e incluso pedían que abandonase su casa para conseguir rehacer sus vidas.