Paquirri, Rocío Jurado y Dúrcal: las herencias envenenadas de las famosos

  • Muchas de estas familias adineradas de la sociedad española han acabado en los tribunales y aireando los trapos sucios en la televisión

  • No han sido muchas las sagas que han conseguido hacer borrón y cuenta nueva tras la muerte de uno de sus miembros

  • Ni los Dúrcal ni los Martínez de Irujo se libraron de las disputas aun habiendo heredado en vida

El refranero español está lleno de frases sobre herencias, como “el que mucho hereda, poco aprecia” o “herencia mal habida, nunca será bien repartida “todos ellos reflejan la sabiduría popular y ofrecen lecciones sobre la importancia de apreciar, respetar y valorar las herencias familiares de manera adecuada. No obstante, muchas son las familias de famosos que no han sabido llevarse a bien y han acabado en los tribunales. 

Sagas como la de la Pantoja, Rocío Jurado, Rocío Dúrcal, Ángel Nieto, Encarna Sánchez, Cayetana Martínez de Irujo y Camilo Sesto, no han dejado a nadie indiferente. Los enfrentamientos por las fortunas que han dejado sus seres queridos han acabado en los juzgados, pero también en los platós y en las portadas de las revistas.

Quizás la herencia más sonada es la de Paquirri, pues entre madre, hijo y hermanos han aireado durante años los trapos sucios tras la muerte del torero, llegando incluso a tener un programa propio, `Cantora: la herencia envenenada´. El 2006 fue el año de la muerte de dos grandes estrellas de la canción española: Rocío Jurado y Rocío Dúrcal morían de cáncer, dejando una herencia envenenada que solo la familia Dúrcal supo solucionar. Otros que supieron arreglar la situación fueron los Nieto, un año después de la muerte del campeón llegaron a buen puerto. El legado de Encarna Sánchez es toda una trama que daría para escribir una buena película. La herencia de vida de Cayetana Martínez de Irujo para casarse con Alfonso Diez parece que tampoco suficiente para sus hijos. ¡Así han sido algunas de las herencias más famosas del país!

La herencia de Paquirri: en guerra desde 1984

La guerra por la herencia del fallecido Paquirri lleva dando de qué hablar desde su misma muerte en 1984 y dos años después se repartiera su legado. Desde entonces hasta ahora los movimientos y las visitas a los tribunales han sido constantes. No obstante, en 2020 hubo un antes y un después. Paquirrín, abrió la caja de Cantora y gritó a los cuatro vientos con un programa en prime time, `Cantora: la herencia envenada´, las miserias de su madre y que la herencia del torero de sus hermanos Fran y Cayetano está oculta en la finca de su padre. 

Rocío Jurado y sus 7 millones de euros

Los Jurado ya no son tal desde el momento en el que Rocío Jurado se marchara de esta vida en 2006. Su herencia de 7 millones de euros, no se repartía de manera equitativa entre hermanos y su viudo. El objetivo de la más grande de que todos quedaran contentos con su herencia, pero la familia tardó un año en ponerse de acuerdo y acabó totalmente rota.

Rocío Jurado dejaba un tercio de sus bienes a cada uno de sus hijos: Rocío, Gloria Camila y José Fernando; pero a Rociíto, la mayor y la única biológica, le tocó más, incluido su patrimonio musical. José Ortega Cano, se quedó con la finca `La Yerbabuena´, y la ganadería. A sus hermanos y a su secretario, también los dejó colocados a quienes dejó el tercio de libre disposición. Aunque todos hayan heredado, lo cierto es que sus disputas han seguido durante años en los tribunales y en la televisión.  

Rocío Dúrcal y sus inmuebles

El 2006 también se llevó por delante a Rocío Dúrcal y trajo un sabor amargo a la familia, no solo por la partida de la matriarca, pues la herencia acabó en los tribunales. Aunque la cantante habría dejado en vida parte de sus propiedades, a su muerte, Rocío Durcal dejaba a su marido 900.000 euros y a cada uno de sus tres hijos, Carmen, Antonio y Shaila, les legaba 350.000. Las joyas se repartieron entre las dos chicas. Hasta ahí todos contentos, no obstante, los dos hijos mayores llevaron a su padre ante los tribunales, pues en el testamento no se habían incluido los inmuebles de la cantante en Miami, México y Marbella. Finalmente fue Shaila, la hija pequeña del matrimonio, quien puso orden y por suerte para todos en la recta final de la vida de Junior la familia estaba unida. 

Ángel Nieto

Los Nieto eran una familia unida hasta que el trágico fallecimiento del motorista que surgieran las diferencias, aunque han sido discretos con el tema y no los han gritado a los cuatro vientos, lo cierto es que la relación entre la viuda y los hijos mayores del piloto ha pasado por momentos complicados.

Belinda Alonso, pareja del piloto en el momento de su muerte acepto un acuerdo con la compañía de seguros que cubría la responsabilidad civil del vehículo que provocó el accidente. Este ‘pacto’ conllevaba una indemnización de casi un millón para ella y su hijo Pablo, pero los hijos mayores de Ángel no parecían estar de acuerdo con esta gestión. De hecho, el hijo mayor de Ángel, Gelete, aseguró a la revista `Semana´ en su día que no tenían conocimiento de esta transacción.

Tardaron un año en repartir su patrimonio: negocios, viviendas y el dinero. Una vez aclaradas sus diferencias los hermanos siguen están muy unidos a pesar de sus diferencias de edad. 

La trama de Encarna Sánchez

Más que una herencia envenenada el legado de Encarna Sánchez es una trama y además, muy enrevesada. Amas de llaves, robos de joyas y de dinero, documentación ficticia y viejas amistades es solo la punta del iceberg de un interesante entramado. La heredera universal de Encarna Sánchez era su amiga y locutora de radio, Clara Suñer. Se conocieron en los años 60, cuando la periodista redactó su primer y único testamento válido. Sin embargo, la incapacidad de Encarna Sánchez dejó en manos de su ama de llaves, su secretaria y su productor de radio millones de pesetas y bienes que se volatilizaron como por arte de magia mediante transferencias y cambios de titularidad de cuentas de las que sospechosamente se vieron beneficiados. 

La herencia en vida de Cayetana Martínez de Irujo

Por amor al que fue su último marido, Cayetana Martínez de Irujo, repartió su herencia en vida para tener el visto bueno de sus herederos para casarse con Alfonso Diez. Siguiendo la tradición del mayorazgo, Carlos Fitz-James Stuart, el mayor, fue el más beneficiado por Cayetana de Alba. Algo que ni a Cayetano Martínez de Irujo ni a Jacobo les convenció pues siempre han reprochado que deben ser la única familia que cumple con el mayorazgo en pleno siglo XXI, donde el mayor se quede con el 60% o 70% de todo. 

Camilo Sesto

 La muerte de Camilo Sesto le dejó todo a su hijo Camilo Blanes, recibiendo un patrimonio millonario y los derechos de autor que podrían generar 200.000 euros al año. La madre de “Camilín” acusó al administrador de Camilos Sesto de desleal, no obstante, el heredero no acudió a los tribunales, dándose por satisfecho con más de 8 millones de euros en propiedades inmobiliarias.