La Guardia Civil interviene casi 100 kilos de pescado inmaduro en el Puerto de Altea, en Alicante

GUARDIA CIVIL
  • Se ha intervenido principalmente pulpo de roca y merluza

  • Las actuaciones han derivado en la instrucción de seis actas de infracción, imputadas a tres buques pesqueros, dos mercantiles y un particular

  • Los acusados podrían ser sancionados con hasta 60.000 euros y ser suspendidos de su actividad

La Guardia Civil ha intervenido más de 90 kilos de pescado inmaduro en el puerto de Altea, Alicante. Una intervención que se ha llevado a cabo en el marco de las actuaciones realizadas dentro del Plan Anual de Control Integral de Actividades Pesqueras (Paciap) y en colaboración con el inspector de Pesca Marítima de la Generalitat Valenciana. Así, han detectado diversas irregularidades en la captura y comercialización de productos pesqueros frescos.

Durante la operación, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza, Seprona, de Alicante y el inspector de la administración autonómica reconocieron las embarcaciones presentes en el puerto, así como la lonja destinada a la comercialización de pescado. Como resultado, se instruyeron seis actas de infracción y se intervinieron más de 90 kilos de pescado, principalmente pulpo de roca y merluza inmaduros, según ha informado el instituto armado en un comunicado.

Control e irregularidades detectadas

Las inspecciones realizadas permitieron descubrir que algunos buques locales estaban comercializando partidas de pulpo de roca que no cumplían con el peso mínimo reglamentario de 1.000 gramos, tal y como exige la normativa. Además, los investigadores localizaron a un particular que intentaba transportar de manera clandestina un envase cerrado con más de siete kilos de merluza inmadura, adquirida directamente de un buque y fuera del marco de la normativa vigente.

Las actuaciones han derivado en la instrucción de seis actas de infracción, imputadas a tres buques pesqueros, dos mercantiles y un particular, por incumplimiento relacionado con la captura, comercialización y adquisición de especies pesqueras fuera de los estándares legales establecidos. Todas las actas se han remitido a la Dirección Territorial de Agricultura de Alicante, que decidirá las sanciones correspondientes.

Destinos de los productos intervenidos y posibles sanciones

Los más de 90 kilos de pescado intervenidos fueron depositados en la cámara de la lonja, por lo que quedaron a disposición de la Dirección Territorial de Agricultura y Pesca de Alicante, que posteriormente ha ordenado su entrega a un centro benéfico.

Las irregularidades detectadas podrían constituir vulneraciones graves a la Ley 5/2017, de 10 de febrero, de pesca marítima y acuicultura de la Comunitat Valenciana, con sanciones que oscilan entre 601 y 60.000 euros. Además, los buques implicados podrían enfrentarse a la suspensión de su actividad pesquera.