Un joven de 15 años, líder de la organización que reclutaba a menores suecos y daneses para asesinar por encargo

La Policía Nacional ha detenido en Alicante a varios miembros de una organización que reclutaba a menores suecos y daneses para asesinar por encargo.

La investigación comenzó hace unos meses cuando la Policía detuvo a un joven que vino a España para matar a un miembro de una banda rival.

Lo sorprendente es que el líder de la banda era un menor de 15 años, no sus padres, no estaba escolarizado y dirigía una agencia de sicarios que la fiscalía sueca perseguía desde hacía meses.

Desde Alicante, el menor manejaba la banda sin salir para nada de la vivienda, por medio de aplicaciones encriptadas. De este modo contrató a uno de los menores detenidos por la Policía en Benalmádena, Málaga, antes de que perpetrara un atentado por encargo.

Tenía previsto el envío de un fusil de asalto y tenían perfectamente planificada su huida que, en un primer momento, iba a ser mediante un patinete eléctrico. En Dinamarca se llevaron a cabo otras dos detenciones, también de otros dos menores de nacionalidad sueca y, a estos, se les intervinieron otras dos armas de fuego”, explicaba Ana Ramón, portavoz de la Policía Nacional.

A todos los había enviado el joven líder de la banda. El detenido trabajaba para organizaciones de traficantes y, precisamente, el vínculo con su padre con el narcotráfico le ayudó a promocionarse en el mercado.

Se le buscaba por atentados en Malmö, donde en agosto otro menor de 15 años disparó a un hombre. Y en Kista, donde de nuevo, menores reclutados actuaron violentamente con explosivos.

La utilización de soldados niños suecos extremadamente violentos es de máxima preocupación. Además, España vigila la penetración de la mafia sueca en el tráfico de marihuana y hachís para hacer dinero rápido y saltar a la cocaína. Ya han exportado atentados al estilo que azota Suecia, con cerca de 200 solo el año pasado.