Una extrabajadora de una clínica de depilación ubicada en el municipio de Elda (Alicante) se enfrenta a una petición de seis años de cárcel. Es lo que solicita la Fiscalía por presuntamente grabar a varias clientas, sin que lo supieran.
Ya este verano publicamos el caso del hombre que grababa a sus vecinos en otra localidad alicantina. Los hechos por los que está acusada la exempleada ocurrieron entre 2009 y 2016, años en los que llevó a cabo las grabaciones a mujeres.
Según informa el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), el Ministerio Público le atribuye cinco delitos contra la intimidad. Ya que en su mayoría, tomó imágenes de la zona púbica de las afectadas.
Mientras las depilaba, filmaba con un plano frontal a través de una microcámara instalada en un bolígrafo. Éste lo colocaba en la misma camilla donde se tumbaban las clientas. Aunque no actuaba sola, ya que hay otro acusado.
Se trata de un hombre que también puso una segunda cámara en una rejilla del techo de la cabina de depilación. El 15 de noviembre del 2018, agentes realizaron una entrada y registro al domicilio de ambos encausados.
Allí, en el municipio de Petrer, encontraron varios discos duros con vídeos de las perjudicadas, grabados con esos dispositivos ocultos. El juicio se celebra este martes 29 de octubre a las 9:30 horas en la Audiencia Provincial de Alicante.
Para el varón, la Fiscalía pedirá una pena de tres años y cuatro meses de cárcel, también por dos delitos contra la intimidad de las víctimas.
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