Los agricultores han comenzado este jueves la tradicional quema de la paja del arroz que se realiza tras la recolección de la cosecha. Una jornada ideal para realizar esta práctica debido a que sopla viento de poniente y el humo se desplaza hacia el mar, según informa Lydia Cruz.
De esta forma, se evitan las imágenes de años anteriores en los que el humo cubría la ciudad de Valencia y las poblaciones cercanas a la Albufera, con las consiguientes molestias respiratorias para los ciudadanos.
Este año, tras las negociaciones entre las asociaciones agrícolas y el Consell, los agricultores tienen de plazo hasta el próximo 31 de octubre. Quedan excluídos los festivos y los fines de semana y los días en las que las condiciones meteorológicas no lo permitan. Para ello, los agricultores cuentan con la aplicación QUEPAR desarrollada por la Generalitat Valenciana con el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM). Este sistema permite informar en tiempo real de las condiciones meteorológicas, y en especial la dirección del viento, en la zona del parque natural de la Albufera para que el humo provoque el menor impacto ambiental posible y también la menor molestia para las poblaciones vecinas.
En Valencia hay algo más de 15.000 hectáreas de arrozales, de los que se van a quemar entre 10.000 y 12.000 hectáreas.
La quema de la paja tiene innumerables beneficios para los cultivos, ya que permite eliminar malas hierbas, insectos y otros patógenos que pueden afectar al arroz.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.