Las aguas residuales de Valencia podrían contener restos de la viruela del mono

La viruela del mono, conocida también como mpox, lleva presente en la Comunitat Valenciana desde 2022, año en que se notificaron los primeros casos, pero es ahora, durante el verano, cuando ha captado considerable atención mediática, especialmente tras la aparición de numerosos casos en España y también en nuestra región, es por ello que según datos de la Conselleria de Sanidad, durante este año se han detectado 13 casos de mpox solo en la Comunitat. 

Ante esta situación, la Conselleria está estudiando implementar un sistema de monitoreo de las aguas residuales de las ciudades en busca de restos del virus, un enfoque similar al utilizado con el Covid-19. Este análisis sería realizado por el centro GOLab de la empresa valenciana Global Omnium, y se considera una herramienta eficaz para evaluar la propagación del virus en la población. El Ministerio de Sanidad, por su parte, ya ha destinado fondos para ampliar la vigilancia, incluyendo la búsqueda del virus mpox en estos análisis. 

Desde entonces, se han registrado 590 contagios en la región, Fernando Gómez Pajares, subdirector general de Epidemiología y Vigilancia de la Salud de la Conselleria de Sanidad explica que la mpox se considera una enfermedad de declaración obligatoria por lo que cualquier médico que diagnostique un caso debe notificarlo a Salud Pública para su vigilancia.

 Esto quiere decir que cada vez que se confirma un caso de viruela del mono en el laboratorio, un técnico de Salud Pública debe investigar el caso. Esta vigilancia incluye tanto el ámbito sanitario público como el privado, con hospitales que remiten rutinariamente información relevante a la red microbiológica valenciana (RedMIVA).

 Los síntomas iniciales de la mpox incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares e inflamación de los ganglios linfáticos, seguido de la aparición de lesiones en la piel.

Aunque se trata de una enfermedad peligrosa, la vacunación no está recomendada al público general, sino dirigida a colectivos de alto riesgo debido a su modo de transmisión, que requiere contacto directo. "Se trata de personas con prácticas sexuales de riesgo, especialmente hombres que tienen sexo con hombres", explica. La pauta de vacunación incluye dos dosis y su eficacia se estima en un 85%.

Asimismo, la vacunación está recomendada para personas que, por su trabajo, están en riesgo, como personal sanitario en consultas especializadas, o aquellos que trabajan en laboratorios y locales donde se mantienen relaciones sexuales de riesgo. Para los viajeros a países con riesgo de mpox, el Ministerio de Sanidad sugiere una evaluación personalizada antes de recomendar la vacunación.

Por otro lado, las personas que ya han estado expuestas a un caso confirmado también deberían vacunarse para reducir la probabilidad de enfermar o, en caso de hacerlo, que la enfermedad sea más leve.

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