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Este jueves por la tarde se declaraba un incendio forestal entre Benicàssim y Oropesa (Castellón), con tres focos diferenciados en una zona de vegetación cercana a la AP-7. El fuego, ya controlado hacia la noche, se produjo entre los kilómetros 413 y 419 de la carretera.
Hasta el lugar de los hechos se desplazaron diferentes dotaciones de los Bomberos de la Diputación así como unidades de Bomberos Forestales de la Generalitat y los bomberos del Ayuntamiento de Castellón.
Durante la noche han continuado las labores de bomberos forestales de la Generalitat Valenciana y el Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón. Las labores de extinción no han presentado dificultades gracias a la ausencia de viento.
Sin embargo, los trabajos de extinción sí han obligado a cortar un carril de la AP-7 en dirección a Castellón. Esto ha provocado dos kilómetros de retenciones, según ha informado la DGT.
En un primer momento, parecía que únicamente había un foco de fuego, pero rápidamente se activaron otros dos focos diferenciados. Uno de estos focos comenzó a expandirse hacia huertos y bancales.
La presencia de estos tres focos hace que se baraje la hipótesis de un fallo mecánico en un vehículo. El transporte podría haber ido soltando piezas incandescentes originando los distintos fuegos. Otra posibilidad podría ser de origen humano, concretamente, provocado por un pirómano. La investigación de los hechos continúa abierta.
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