El Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) ha retirado ya el dispositivo preventivo del incendio declarado el pasado jueves en un edificio de 14 alturas en el barrio valenciano de Campanar y que ha costado la vida a diez personas. Con respecto a los heridos, continúa ingresado un bombero en el Hospital La Fe, el único de los quince heridos -siete de ellos bomberos- en el incendio del edificio que queda hospitalizado, sin que su vida corra peligro.
El otro bombero que estaba ingresado desde el pasado jueves ha sido dado de alta del Hospital Peset, donde permanecía hospitalizado, según han informado fuentes sanitarias.
El 'president' de la Generalitat, Carlos Mazón, se ha hecho eco de esta mejora en el estado del efectivo de extinción en su cuenta de X --antes Twitter--: "¡Por fin nos llegan buenas noticias!, ha dicho, y ha deseado una "pronta recuperación" al bombero, que hoy ha dejado la UCI, ha pasado a planta y "se marcha a casa, con su familia".
El president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, y la alcaldesa de València, María José Catalá, visitaron la tarde de este viernes a los dos profesionales para agradecerles su trabajo y trasladarles el "cariño real" y el "apoyo social" por su labor heroica.
En declaraciones a la televisión pública valenciana À Punt, Mazón señaló a su salida de La Fe que ha podido charlar con Jose, que tiene "las manos calcinadas" durante las labores de rescate de algunos de los vecinos que habían quedado atrapados por las llamas que devastaron el inmueble y posteriormente calcinaron el bloque anexo.
El president, visiblemente emocionado, ensalzó su labor porque logró sacar del inmueble en llamas a varias personas aunque por sus heridas no pudo hacerlo también con otras, y de hecho aún no sabía qué había pasado después de su evacuación.
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