Tomar un café acompañado de gatos es un placer del que no solo pueden disfrutar los amantes de estos animales en Japón. En Alicante también encontramos el Cat Relax,, un local, situado en la Plaza Joaquín María López 7, donde encontramos una agradable sala con sofás, mesitas y todas las comodidades para disfrutar de un relajante momento acompañado de una decena de peludos.

La cafetería se encuentra en la sede de la Asociación Benéfica por la Adopción e Inserción de felinos en Alicante (ABAIFA) donde recogen a gatos que han sufrido maltrato o abandono y a los que tras recuperarlos les buscan una nueva familia.

Son estos animales los que se mueven como en casa, porque es lo que es la cafetería, que está abierta la tarde de los martes, jueves, viernes y sábados . "Para poder venir es necesario reservar a través de nuestra página de Facebook y pagar siete euros, en los que se incluye la consumición y un bol con chucherías para los gatos", explica Guillermina Castrobeekman, la fundadora de esta asociación.

Con ese dinero se financia el mantenimiento de los gatos, que incluye la comida y los gastos veterinarios.

Entre los clientes abunda la gente joven, que busca pasar un momento de tranquilidad. "Vienen muchas parejitas jóvenes y madres con sus hijos porque es muy terapéutico y relajante para los pequeños. También suelen acudir grupos de niños con Asperger porque les funciona muy bien como tratamiento", señala Guillermina, que explica que "también tenemos personas que en sus casas tienen personas con alergias y aquí pueden disfrutar de su amor a los peludos".

Para poder acceder es necesario cumplir una serie de normas estrictas. Los visitantes no pueden acudir con su propio animal, y solo pueden tocar a los gatos si ellos se acercan. Además, no se puede hacer ruido y están prohibidas las fotos con flash para no alterar a los animales.

La principal misión de la asociación es ofrecer una nueva vida a estos animales. "Aquí las personas que quieren adoptar tienen la oportunidad de venir varias veces y conocer a los animales antes de decidir al que quieren adoptar", afirma Guillermina, que explica que "muchos ya tienen un gato en casa y buscan otro que tenga unas características determinadas para que se hagan compañía".

Sin embargo, las adopciones han caído en picado en el último año. Mientras que en 2022 dieron en adopción a 167 gatos, este año solo han sido 60. "La nueva Ley de Bienestar Animal está haciendo que muchas personas interesadas se echen atrás por la necesidad de que los animales lleven chip y que haya que castrarlos, unos gastos que con la crisis económica actual son difíciles de afrontar para las familias".

Para aquellos que finalmente deciden adoptar el proceso es sencillo. "Tienen que rellenar y firmar un cuestionario previo y demostrar que cuentan con una casa segura con mosquiteras en ventanas y balcones para evitar accidentes, porque cada año mueren muchos gatos al precipitarse desde las viviendas", cuenta Guillermina.

En la asociación también cuentan con camadas de recién nacidos. En este caso todos los cachorros se entregan vacunados y esterilizados y en caso de no tener la edad adecuada para la esterilización, la asociación se encarga de ello cuando cumplen 5 o 6 meses.

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