Los Mossos d’Esquadra continúan con la investigación policial y judicial de la presunta violación que sufrió un niño de 13 años con asperger en el instituto Verge del Roser de Vallirana. Los agentes están a la espera de poder registrar uno de los teléfonos móviles de los menores, algo que hasta ahora no han podido realizar.
Los agentes de la Policía regional interrogaron a los cuatro imputados tras la denuncia presentada por los padres del menor agredido. Entonces, les pidieron que entregaran sus terminales móviles. Tres de ellos lo hicieron voluntariamente. Sin embargo, uno de ellos se negó.
Por ello, los Mossos han pedido autorización al juez, tal y como ha publicado ElCaso.cat y están a la espera de que se la concedan. El móvil se encuentra custodiado por los agentes, pero estos no pueden acceder a él hasta que no tengan una autorización judicial.
En los otros tres móviles, los agentes no han encontrado nada relacionado con las agresiones sexuales al niño de 13 años. Sin embargo, sospechan que el hecho de que uno de los niños se negara es significativo, por lo que podría esconder algo dentro.