Incredulidad, estupor e indignación en Solana del Pino, Ciudad Real, donde unos vándalos han pintado una bandera de España sobre unas pinturas rupestres que tienen entre 6.000 y 7.000 años de antigüedad, tal como ha denunciado la propia alcaldesa de la localidad, Josefa Poyatos.
Los implicados en esta barbarie contra el patrimonio histórico han destrozado el tesoro del neolítico, que ahora será muy difícil de recuperar. Se encontraban en el Peñón del Muerto, en la carretera que va de Solana del Pino hacia Andújar, en plena Sierra Madrona.
El suceso tuvo lugar el pasado fin de semana, y no es la primera vez que el Peñón del Muerto era víctima de actos vandálicos ya que hace aproximadamente quince años las pinturas rupestres que allí se localizaban fueron arrancadas con algún tipo de maquinaria y se las llevaron.
Ahora, el resto de pinturas que aún quedaban, tras aquél acto vandálico, han sido tapadas con un dibujo de la bandera de España. Para poder hacerlo, según la alcaldesa, han tenido que ir al menos dos personas que se sujetaran una a la otra o llevar algún tipo de escalera.
La alcaldesa de la localidad ha recalcado que la Benemérita ya tiene conocimiento de lo sucedido, ha dicho Poyatos, quien ya se lo ha hecho saber también a la Diputación de Ciudad Real y al Gobierno de Castilla-La Mancha.
Al respecto de quiénes han podido ser los autores de estas pintadas, Josefa Poyatos (PSOE) ha asegurado que "en el pueblo --de 300 habitantes-- nos conocemos todos", pero "no podemos acusar a nadie". "Como pensar, podemos pensar que ha sido gente que no es afín a nuestras ideas, pero nosotros no podemos echarle la culpa a nadie", ha señalado.