Sarah-Jane tenía ganas de fiesta así que no se lo pensó dos veces y salió con su hijo, Django de 4 meses, a disfrutar de la noche. La madre le puso unos cascos al bebé y se dirigieron a una fiesta en la que tocaba la banda de su otra hija.
A las 12:30 de la noche, la policía acudió a la fiesta para que parasen la música y se encontraron a la madre con el bebé en brazos.
Como afirma el diario The Sun, Sara-Jane aseguró que no era la primera vez que lo hacía, ya había salido con su pequeño en otras dos ocasiones anteriores; “no veo nada malo en lo que he hecho, no tenía con quien dejarlo así que lo llevé conmigo”
“En Francia o España esto es normal y los padres llevan a sus hijos a festivales de música”
Muchas asociaciones de padres han denunciado el hecho y aseguran que un bebé de 4 meses necesita calma y estabilidad, no música a todo volumen y el tipo de luces que hay en una discoteca.
Los servicios sociales se encuentran estudiando el caso y decidirán sobre la custodia del niño.