Sabían que la droga llegaba en tres contenedores, había que esquivar la presencia del agente de la guardia civil cómplice que dejaría pasar el cargamento. Lograron revisar la carga 8.740 kilogramos de cocaína ocultos entre bananas. Y dejaron que el camionero de la banda la recogiera para detenerlos a todos en esta nave de Málaga.
Los dos empresarios de frutas y verduras huyeron a Francia, fueron detenidos cerca de Lyon. La policía sospecha que ya habían introducido antes cocaína en cantidades más pequeñas y que esta vez habían decidido hacer el cargamento de su vida. El más grande de Europa en contenedor y el mayor de la historia policial en nuestro país.
La cantidad supera la gran operación Temple donde se incautaron 7600 kilos en el barco y otros 5000 en coche. La mayor de nuestra historia hace 20 años. Los sucesivos golpes a los grandes narcotraficantes acabaron con esos grandes cargamentos. Ya nadie se atrevía. Hasta ahora. En diciembre pasado 12.toneladas cayeron en Colombia antes de embarcar y en España otro empresario de frutas importó 6.000 kilos entre bananas. Colombia está ofertando los alijos por el excedente de cocaína desde que las plantas por leu ya nos e pueden fumigar.