En las costas del estado australiano de Nueva Gales del Sur, un adolescente llamado Mani Hart-Deville de 15 años ha muerto después de recibir el ataque de un tiburón blanco. Concretamente, el ataque tuvo lugar en la playa de Wooli situada al norte de Coffs Harbour.
Según han informado diferentes medios locales, el menor de 15 años se encontraba surfeando en la playa junto a varios amigos y familiares. En uno de los momentos que Mani Hart-Deville se encontraba dentro del agua junto a su tabla, algo agarró al joven y este comenzó a gritar.
Nada más escuchar los gritos, sus amigos y familiares consiguieron auxiliarle y sacarle del mar. Una vez que se encontraban en la arena, los demás surfistas intentaron reanimarle y tapar las hemorragias que tenía debido a los mordiscos que le había propinado el tiburón.
Sin embargo, el joven de 15 años falleció debido a las graves heridas que tenía en las piernas y a la gravedad de sus hemorragias. Los investigadores han asegurado que el espécimen que atacó al menor se trata de un tiburón blanco que mide más de 2,5 metros de largo.
La muerte de Mani Hart-Deville es el segundo fallecimiento que se produce durante esta semana a consecuencia del ataque de un tiburón en las costas australianas. El pasado 5 de julio, un hombre de 50 años murió tras ser atacado por un tiburón de tres metros de largo ne la costa este de Australia.
"Varios surfistas acudieron en su ayuda e hicieron huir al tiburón antes de que el herido pudiera ser transportado a la costa", declaraba el comunicado que lanzó la policía australiana a través de sus redes sociales. El ataque se produjo en Kingsciff, a unos 100 km al sur de Brisbane.