En plena crisis del Coronavirus y con todo el país encerrado en casa, vuelve a surgir la mejor cara de la sociedad española; la solidaridad. En los momentos más difíciles para todos, y especialmente para los más vulnerables, iniciativas de ayuda surgen en todas las ciudades.
Por ejemplo, Gabriela recibe en su casa la comida de la mano de un joven que diariamente se la trae a casa. Esta anciana no puede andar sin sus muletas y manteniendo la distancia de seguridad lo agradece con un beso a su “ángel de la guarda”. Para él, es una manera de ayudar y además aprovechar para “salir de casa”.
Pero los mayores no son los únicos que sufren en esta crisis. Muchas familias dependen del cheque comedor y el alimento que reciben sus pequeños en el colegio. Para tratar de paliar esa falta, Telepizza y Rodilla están ofreciendo el servicio de comedor a quien disponga de esta ayuda. Es imprescindible acudir con el DNI y estar en lista.
Otra muestra la encontramos en Galicia, donde en un colegio de Coruña está llevando los tuppers a las familias que no pueden acercarse a recogerla al centro para que en ningún momento los niños que más lo necesitan se queden sin comer.