En el que sería el día de su 20 cumpleaños, la familia de Yéremi Vargas ha solicitado este jueves 18 de julio la reapertura del caso ya que, al revisarlo, se han encontrado con errores de extrema gravedad y con pruebas sin realizar.
"Vamos a proceder a la reapertura del caso. Vamos a interponer acciones y en este caso solicitaríamos que se nombre a otro juez de instrucción", ha afirmado el nuevo abogado de la familia de Yéremi Vargas en una rueda de prensa Marcos García Montes, de Yéremi Vargas en una rueda de prensa en la que han estado los padres y el abuelo del pequeño. “Nuestro fin es único: la reapertura del caso con nuevas diligencias para inculpar a Antonio Ojeda. Yo respeto su presunción de inocencia, pero respeto más el dolor de sus padres”, ha asegurado.
"Tenemos, y no puedo avanzar más, declaraciones manuscritas en los que se habla que no se les trató muy bien. Asimismo, la familia me ha contado que el juez era el que iba transcribiendo las conversaciones, algo que es muy raro", ha continuado el abogado, quien ha recalcado: "El auto da por sentadas una serie de conclusiones policiales que en los informes no aparecen. Lo que él afirma en su auto lo que ha dicho la OCU no es, dice todo lo contrario".
Además, el abogado ha asegurado que el único sospechoso que hubo en el caso, Antonio Ojeda, El Rubio, tenía el móvil, una agresión sexual, y también la ocasión, ya que conocía el lugar y la fecha. "Hay motivos para tomar declaraciones a diversos testigos", ha afirmado, para sentenciar: "No podemos dejar una investigación sin una respuesta judicial".
"Tenemos puestas todas las esperanzas en que un día podamos saber toda la esperanza. Queremos recuperar todo lo que fue de él, saber dónde está y tener un lugar donde llorarle. Poder descansar", ha afirmado la madre de Yéremi Vargas.
El 10 de marzo de 2007, la pista de Yéremi Vargas se perdió cuando jugaba en un descampado cerca de su casa en la localidad de Vecindario, en Santa Lucía de Tirajana (Gran Canaria). Los hechos supusieron que en la isla se desplegara la mayor operación policial hasta el momento para buscar a un pequeño. En los primeros días de la desaparición se recibieron hasta 600 llamadas.
El 13 de marzo de 2010, tras tres años sin noticias, la juez del caso rechazó excavar en el jardín de la vivienda familiar ubicada en Agüimes propiedad de Fernando Torres Baena, el principal acusado del denominado Caso Karate sobre presuntos abusos sexuales en una escuela de artes marciales.
En junio de ese mismo año, se descubre un cráneo en un parque infantil de Santa Lucía de Tirajana, aunque más tarde descartaron su relación. La investigación dio un giro el 3 de marzo de 2012, cuando la Guardia Civil aseguró que tenía nuevos datos sobre un vehículo y ropa del menor.
El 4 de julio de 2014, el ministro de Interior, Fernández Díaz, dijo que había líneas de investigación “bastante buenas” sobre las desapariciones de Sara y Yéremi e insistió en que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado mediante “contacto permanente” con las víctimas.
El 1 de junio de 2016, la Guardia Civil detenía a Antonio Ojeda ‘El Rubio’, condenado a cinco años de prisión por abuso de otro menor. No obstante, el Juzgado de Instrucción número 2 de San Bartolomé de Tirajana consideró que no existían pruebas ni indicios sólidos que le incriminasen en el caso y archivó las diligencias abiertas contra él. Una decisión que fue ratificada en marzo de 2018 por la Audiencia de Las Palmas.