Rocío Carrasco ha desvelado en el programa de Telecinco, 'Rocío, contar la verdad para seguir viva', que su hija Rocío le pegó cuando solo era una adolescente, hasta tal punto de dejarla inconsciente en el suelo. Ella asegura que nunca la denunció, entre otras razones, porque sabe –dice- que quien realmente estaba detrás de todo era su ya entonces expareja, David Flores. El hecho de que los padres usen a los hijos en sus procesos de separación o divorcio es común. Pero el síndrome de la alineación parental, que también se ha comentado en este caso en concreto, no existe. Lo rechazan las instituciones médicas, sociales y judiciales, aunque este falso síndrome se sigue usando como arma en casos de divorcios conflictivos y tras acusaciones de abuso o maltrato Fue el psiquiatra infantil Richard Gardner quien dio nombre al Síndrome de Alienación Parental (SAP), pero el Consejo General del Poder Judicial ha instado a dejar de usarlo en el ámbito judicial, "para evitar que, dada su carencia de base científica, pueda ser tomado en consideración por los órganos judiciales". Tampoco la OMS ni la Agencia Americana de Psiquiatría lo han aceptado nunca como una patología médica.
La realidad es que la polarización inducida de los hijos en contra de uno de los progenitores es muy habitual en los procesos de divorcio o cuando se discute ante la justicia la custodia de los hijos. Uno de los padres manipula al hijo para que rechace al otro progenitor cuando realmente no hay motivo alguno. No debe confundirse, según los expertos, cuando hay casos maltrato o abuso sexual.
El padre o madre que manipula consigue confundirle y al final, sin entender el por qué, el niño se posiciona en contra del otro progenitor. En ocasiones, al sufrimiento del niño hay que añadirle un sentimiento de culpabilidad. Según los psicólogos algunos menores pueden llegar a sentir que la situación es por su culpa.
En Psicolegalemente, una web especializada en periciales psicológicas, dan algunos ejemplos de la conducta ante esta situación:
Rocío Carrasco ha contado en el documental 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' que su hija le pegó cuando era una adolescente, en 2012. Ella ha explicado en directo que nunca la denunció y nunca lo hará porque su hija “es verdugo porque antes ha sido víctima y una víctima más vulnerable que yo (…) Ella no es responsable, el responsable de que ella actuara así es su padre”.
“A mí me pagaba su padre, no la niña”, ha llegado a decir en directo la hija de Rocío Jurado.
Sin embargo, una guía del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en relación a la violencia de género, previene a los juristas sobre lo que consideran un síndrome inexistente. "No ha sido reconocido por ninguna asociación profesional ni científica, habiendo sido rechazada su inclusión en los dos grandes sistemas diagnósticos de salud mental utilizados en todo el mundo, el DSM-V de la Asociación Americana de Psiquiatría, y el ICE-10 de la Organización Mundial de la Salud. Según una declaración de 1.996 de la Asociación Americana de Psicología, no existe evidencia científica que avale el SAP, criticando dicha institución el mal uso que de dicho término se hace, especialmente en los casos de violencia de género", afirma el CGPJ.
En Legaltoday.com mantienen la misma postura frente al SAP: "No está reconocido prácticamente por ninguna asociación profesional del ámbito de la psicológica o psiquiatría ni se encuentra regulado en ningún manual o guía". Y recuerdan que La Asociación Española de Neuropsiquiatría (AEN) ya en 2010 se declaró contraria al uso clínico y legal del llamado Síndrome de Alienación Parental porque pretender incluir el SAP como un trastorno psiquiátrico constituye "un grave intento de medicalizar lo que es una lucha de poder por la custodia de un hijo y una simplificación excesiva de las complejas dinámicas de interacción familiar".