Durante 2018, más de la mitad de las ofertas de empleo (55,8%) generadas en nuestro país pertenecían a alguna de las actividades que se agrupan en el sector terciario, según el último informe elaborado por Adecco e Infoempleo. El dato, aunque ligeramente inferior al cosechado en el ejercicio anterior (56,35%), revalida el rol protagonista que tiene el macrosector servicios en España como motor de creación de empleo. Es decir, seguimos siendo un país de camareros. Por ramas de actividad, hostelería y turismo repite en el primer lugar del ranking de distribución sectorial de la oferta de empleo por tercer año consecutivo, aglutinando el 13,2% del total nacional de ofertas y aumentando la distancia con respecto al resto de sectores.
Las titulaciones más demandadas por las empresas durante 2018 han sido Administración y Dirección de Empresas, Ingeniería Informática, Ingeniería Industrial, Ciencias del Trabajo y el doble grado en ADE y Derecho. Por titulaciones, Administración y Dirección de Empresas (ADE) se mantiene líder en el ranking de las carreras más demandadas, recibiendo el 9% de las ofertas en las que se requieren estudios universitarios. Le siguen Ciencias del Trabajo, Relaciones Laborales y RRHH (2,5%) el doble grado en ADE y Derecho (2,5%), Comercio y Marketing (2,2%), y Economía (1,8%).
De forma general, las ofertas de empleo que requieren candidatos con titulaciones técnicas se han mantenido estables durante este último año, disminuyendo ligeramente su peso con respecto a 2018 (37,1%) al pasar a solicitarse en el 36,2% de las ofertas en las que se especifica el área de la titulación universitaria. Las carreras técnicas más demandadas por las empresas durante 2018 han sido Ingeniería Informática (4,1%), Ingeniería Industrial (3,95%), Ingeniería Mecánica (1,9%), Ingeniería en Electrónica Industrial y Automática (1,8%) e Ingeniería de Telecomunicaciones (1,6%).
El conjunto de titulaciones relacionadas con el ámbito de la salud ha sido el que mejor comportamiento ha registrado durante 2018 en términos de oferta de empleo, incrementando su peso en más de dos puntos al pasar de un 13% en el ejercicio anterior al 15,1% actual. Este aumento está directamente relacionado con la evolución positiva que han registrado las titulaciones que tradicionalmente están entre las más demandadas del área: Medicina y Biomedicina, que se hace con el 2,1% de las ofertas, y Enfermería, que roza el umbral del 2%. El resto de titulaciones de la rama sanitaria ha mantenido su aportación en términos muy similares a los cosechados en 2018, excepto Odontología (0,24%), que cede casi medio punto porcentual en el último año.
Las carreras universitarias del ámbito científico-experimental mantienen estable su volumen de aportación al conjunto de oferta de empleo en la que se especifica titulación, aglutinando el 3,42% en este último año. Biología, Bioquímica y Biotecnología (0,6%), Química (0,6%) y Matemáticas y Estadística (0,4%) han sido las titulaciones más demandadas dentro de esta área.
Durante el último año, las carreras de la rama de Artes y Humanidades aumentan ligeramente la demanda de titulados por parte de las empresas (2,8%), rompiendo con los dos ejercicios consecutivos de pérdida que encadenaban desde 2017. Filología (0,8%) y Bellas Artes y Diseño (0,3%) son las titulaciones más demandadas dentro del área.
Los estudios de Formación Profesional gozan de una creciente empleabilidad, un hecho que se refleja en el elevado volumen de ofertas de empleo destinadas a titulados de FP en comparación con las dirigidas al conjunto de titulados universitarios.
Por primera vez desde el nacimiento de este estudio, hace ahora 22 años, la Formación Profesional se hace con el 42,4% de la oferta de empleo en España mientras la universitaria cae hasta el 38,5%. La cifra, aunque positiva, se divide de forma desigual entre Técnico Superior y Técnico Medio.
Tomando como referencia el global de la oferta de empleo, las titulaciones de Grado Medio de FP han sido demandadas en el 17,8% de las ofertas, tres puntos porcentuales más que hace un año. Las titulaciones de Grado Superior, en cambio, ven cómo disminuye su demanda en más de un punto: de un 25,5% en 2018 hasta el 24,4% actual.
Las áreas que más ofertas de empleo han recibido han sido Administración y Gestión, Electricidad y Electrónica, Fabricación Mecánica, Informática y Comunicaciones e Instalación y Mantenimiento. Entre estas cinco familias profesionales se reparten el 36% de las ofertas en los que se buscan candidatos con Formación Profesional.
El resto de las áreas que han recibido un mayor número de ofertas para titulados en FP durante 2018 han sido Comercio y Marketing, Hostelería y Turismo, Transporte y Mantenimiento de Vehículos, Sanidad y Artes Gráficas, todas ellas con ratios que se mueven entre el 3 y el 1%. La parte baja de la tabla la ocupan las familias de Seguridad y Medio Ambiente, Imagen y Sonido, Actividades Físicas y Deportivas, y Madera, Mueble y Corcho, que juntas no llegan ni al uno por ciento (0,8%) de las ofertas que buscan titulados de Formación Profesional.
Durante 2018, el porcentaje de ofertas en las que se requiere contar con algún idioma extranjero ha sufrido un retroceso al situarse en el 32,25%, un valor inferior al 34,8% alcanzado en el ejercicio anterior. La media de idiomas solicitados se sitúa en 1,18 por oferta de empleo. Inglés repite, un año más, como el idioma más demandado por las empresas en nuestro país. La lengua que domina el mundo de los negocios se mantiene como requisito imprescindible en el 92,7% de las ofertas en las que se solicita algún idioma.
La lengua francesa dobla prácticamente su peso con respecto al ejercicio anterior al pasar de un 6,85% en 2018 al 11,1% actual, y se convierte en la segunda lengua más demandada por delante del alemán, requerido en el 6% de las ofertas. Este último, sin embargo, supera por mucha diferencia al francés en comunidades como Baleares o Canarias, caracterizadas por una importante actividad turística. En valores mucho más bajos a los cosechados por los idiomas mencionados se sitúan el italiano y el portugués, que tan solo son requeridos en un 1,8% y un 1,6%, respectivamente.
En la oferta de empleo publicada en 2018, la retribución directa media ofrecida a las nuevas contrataciones ha sido de 23.812 euros brutos anuales, lo que supone una reducción de un 5% con respecto al salario medio ofertado en el ejercicio anterior.
Si se incluye la variable de la categoría laboral en la ecuación, la remuneración ofrecida a los candidatos durante el último año se ha situado en 43.270 euros para la categoría de dirección, 30.965 euros para mandos intermedios, 24.570 euros para técnicos y 19.650 euros para la categoría de empleados. A modo de referencia, un directivo medio recibe una oferta salarial que es 2,2 veces mayor que la de un empleado y 1,76 veces la de un técnico. En el caso de mandos intermedios, la diferencia se reduce y baja hasta 1,4. El área funcional es otro de los condicionantes a la hora de baremar los rangos salariales.
Las mayores ofertas salariales han sido dirección y gerencia (45.186,21€), tecnología (30.613,07€) y legal (28.761,76€). Entre las peor remuneradas se encuentran administrativos y secretariado (20.786,12€), atención al cliente (20.880,24€) y compras y logística (21.846,96€).
Ocho de cada diez compañías afirman haberse encontrado con dificultades para cubrir determinadas vacantes durante 2018, 20 puntos más que hace un año (58,6%). Unas expectativas salariales demasiado elevadas y la falta de candidatos con una determinada experiencia y/o competencia técnica son las razones que motivan esa escasez de talento para las empresas. Las áreas más afectadas han sido, un año más, las de comercial (30,7%), TIC (26,15%) e ingeniería y producción (19,8%). Además, el 62,5% de las empresas reconocen haber tenido que dejar desierta alguna de las vacantes para las que han buscado profesionales. La media de puestos de trabajo sin cubrir se sitúa en 8,8 por empresa.