Según ha publicado el diario Mirror, Daniel Jones agarró a Sophie por el pelo y la obligó a meterse en el coche delante de su horrorizada familia en el que la trasladó a un terreno abandonado donde la obligó a desnudarse y la ató a un árbol con el pijama.
Sophie Lazell consiguió escapar deshaciendo los nudos y se escondió en las zarzas. Después corrió durante una hora hasta que encontró una casa en la que vivía una pareja de ancianos que llamó a la policía.
La joven ha hablado por primera vez de manera pública desde el suceso, en diciembre de 2013. Había pasado el día con Jones, pero él se mostró molesto cuando ella le dijo que quería pasar la noche sola.
Sophie afirma que estaba a punto de dormir cuando escuchó un ruido, la puerta principal estaba siendo golpeada. Escuchó a Jones gritar.
“Me levanté y encontré a Daniel con una barra de metal. Había roto la televisión. Me dijo que fuera con él. Mi madre apareció y mis hijos salieron de su habitación”.
Jones empujó a Sophie por la puerta principal.
“Mientras me iba, les dije a mis hijos que todo iba a estar bien. Ellos estaban aterrorizados” comentó la joven madre.
Después del suceso, fue llevada al hospital por la policía. Jones se dio a la fuga pero fue arrestado cuatro semanas más tarde.
“He sufrido ataques de ansiedad y pesadillas desde entonces”.
En agosto, Jones fue condenado a 20 meses de prisión por secuestro y se le impuso una orden de alejamiento de cinco años.