La vacunación y las nuevas variantes del coronavirus están reduciendo los casos del llamado covid persistente, pero todavía siguen dándose, y los síntomas pueden permanecer durante meses sin que la ciencia le haya puesto un remedio.
Sandra González lleva 14 meses sufriendo más de 40 síntomas . “Se me olvidan las palabras, se me olvida escribir, se me olvidan muchas cosas”, explica.
A pesar de superar la enfermedad, sus secuelas perduran en el tiempo de forma indefinida. En el caso de Sandra González, tiene "picores en las manos, me duelen muchísimo los ojos…”.
Juan Antonio Santaella, más de un año después de contagiarse, sigue sufriendo secuelas neurológicas que van más allá de las comunes. “Nerviosismo completo, no podía concentrarme directamente en el trabajo. Podría decir si me pusiera a contarlos uno a uno más de 30, seguramente”, indica sobre unos síntomas que van desde erupciones cutáneas hasta la caída del pelo.
No obstante, identificar que se está enfermo de covid persistente puede no ser tarea sencilla y la ciencia y poner un tratamiento tampoco. “Para todo el tema de déficit de atención se puede hacer terapia conductual, pero realmente como no sabemos cuál es la causa de esta enfermedad, o de este síndrome, no tenemos un tratamiento que sea específico”, señala Bernardino Alcázar, neumólogo.
Según los expertos, hasta un 20% de los contagiados pueden desarrollar covid persistente. “Muchos más síntomas pueden afectar prácticamente a cualquier parte del organismo en cuanto a sistema. Lo que sí parece es que tampoco tiene relación con la infección aguda”, añade Alcázar.
Por todo ello, la ciencia sigue investigando esta nueva enfermedad. Es lo que piden los afectados. “Hace falta mucha investigación para saber la etiología de la enfermedad, por qué nos pasa”, expresa Sandra González.