Los Mossos d'Esquadra han detenido a cuatro hombres, de entre 40 y 50 años, como presuntos líderes de un grupo criminal que supuestamente hurtaba dinero y objetos de valor de vehículos de turistas estacionados en áreas de servicio y gasolineras de la autopista AP-7, la carretera C-31 y el Aeropuerto de Barcelona.
Los detenidos distraían presuntamente a los turistas mientras llenaban el depósito del coche, cargaban las maletas en el maletero o descansaban en las áreas de servicio, y, a continuación, sustraían sus efectos personales de los vehículos, aprovechando que no los habían cerrado con llave.
Los Mossos han informado este domingo en un comunicado que los presuntos ladrones realizaron hasta nueve hurtos en los que se hicieron con un botín de 10.000 euros, divisas extranjeras, joyas, bolsos y aparatos electrónicos, entre otros.
Los cuatro presuntos líderes de la banda fueron detenidos la madrugada del 8 de julio en el marco de una investigación que se inició hace dos meses, a partir de varias denuncias e identificaciones policiales. Según la policía autonómica, los cuatro detenidos tienen "un grado de especialización muy elevado, perfeccionado a lo largo de los años" en este tipo de hurtos, y uno de ellos tiene una orden de alejamiento de la AP-7 por hechos similares.
Formada por cuatro integrantes, la banda iba cambiando de ubicación para evitar ser localizada, y presuntamente recababa la colaboración de terceros de forma puntual para los golpes que requerían "de más infraestructura". Los detenidos pasaron el miércoles a disposición del juez, que los dejó en libertad con cargos; la investigación está abierta y no se descartan más detenciones.