Los investigadores hablan de violencia extrema. Kelly, de 17 años, fue atada y brutalmente degollada en el piso donde vivía con su madre. Tras el crimen, el presunto asesino, su novio de 19 años, saltó por el balcón. Fue la caída lo que originó una llamada de un vecino a emergencias.
Cuando los Mossos entraron en la casa, hallaron el escenario del crimen.
Kelly, de origen ecuatoriano, y su presunto asesino, dominicano, llevaban poco tiempo de relación. Estaban solos en el piso de Reus cuando ocurrieron los hechos. La madre de Kelly estaba de viaje, volvió a casa horas después.
Dolor entre quienes conocían a la menor y consternación en el entorno del asesino. Kelly estudiaba 4 de la ESO y su asesinato ha supuesto un gran impacto emocional entre sus compañeros de instituto que la han llorado junto a muchos ciudadanos de Reus.
Si se confirma, Kelly será la sexta víctima de la violencia de género este año. Ninguno de los agresores había sido previamente denunciado por maltrato.