Algunas de las principales carreteras de las grandes ciudades están registrando diversas retenciones y circulación lenta desde primera hora de la tarde, como es el caso de Madrid o Barcelona, entre otras.
En el marco del estado de alarma y con todas las autoridades sanitarias instando a permanecer en casa y no viajar a segundas residencias durante la Semana Santa, las imágenes captadas por las cámaras de tráfico en las cuales se aprecian colas de vehículos parados en plena autopista, están provocando la voz de alarma en las redes, con muchos ciudadanos denunciando que, en un momento en el cual la reducción de la movilidad y el aislamiento es esencial para contener el coronavirus ante una emergencia sanitaria sin precedentes, son inadmisibles escenas como estas.
No obstante, cabe decir que, especialmente, muchas de las retenciones que se están produciendo se deben a la intensificación, el incremento y el refuerzo de los controles que la DGT, en colaboración con la Guardia Civil y la policía están efectuando para, precisamente, garantizar que las medidas de confinamiento se siguen respetando. Y es esencial que lo hagamos, porque España sigue combatiendo los dramáticos efectos del COVID-19, que deja ya más de 145.600 casos y más de 14.500 muertes, habiéndose producido además un repunte en las últimas 24 horas, con 752 fallecidos más.
Concretamente, según datos de la DGT, hay retenciones de nivel amarillo en la A-2 a la altura de Madrid en dirección Zaragoza, en la A-3 hacia Valencia, la A-5 en sentido Badajoz y especialmente en la A-6, tanto en Madrid como en Las Rozas hacia A Coruña.
Al mismo tiempo, también se registran este tipo de retenciones en la B-10 a la altura de Barcelona, detectándose congestión hacia el Nudo de la Trinidad.
Además, un accidente en la GC-2, en Las Palmas, ha provocado el corte de la vía en Arucas en sentido decreciente de la circulación, mientras en Murcia un vehículo averiado complica la circulación en la A-7 a la altura de Lorca en dirección Alicante.
Del mismo modo, hay varias vías cortadas al tráfico en Vizcaya y Guipúzcoa por desprendimientos, como en la AP-8 en Zaldívar hacia Irún y en Eibar en dirección Cantabria, mientras que en Cáceres también se ha cortado la circulación en la N-521 en Valencia de Alcántara en ambos sentidos.
En el resto de las carreteras, informa la DGT, se circula "sin problemas", recordando que en el marco del estado de alarma no se puede circular salvo que sea "imprescindible y totalmente justificado".
En esta línea, el Gobierno ha llamado hoy a "mantener la disciplina y limitar al máximo los desplazamientos", especialmente tras haberse detectado este martes un ligero repunte en el número de desplazamientos.
"Es una ligera subida puntual de un día que no marca tendencia, pero que observamos y ante la que recordamos y recalcamos la importancia de mantener la alerta y reducir la movilidad al mínimo", ha recalcado la secretaria general de Transportes, María José Rallo.
En el caso del tráfico en vehículo particular, este martes caía un 81% respecto a días normales, frente al descenso del 83% que venía mostrando en los días anteriores.