Valencia, en fase 3: los pueblos que debes visitar

La Comunidad Valenciana es conocida por muchas cosas... entre ellas sus preciosos pueblos. Este 15 de junio entra en fase 3. Si estás pensando en una escapada o unas vacaciones dentro de España y te has decidido por esta zona, es muy recomendable aprovechar para conocer algunos de sus enclaves más escondidos y tranquilos, sin dejar de lado su costa: esta comunidad alberga algunas de las playas más espectaculares de España. Descubre algunos de los pueblos con encanto de la Comunidad Valenciana.

Pueblos con encanto en la Comunidad Valenciana

El Castell de Guadalest se encuentra en el sector septentrional de la Marina Baixa y uno de su grandes rasgos característicos es haber sabido mantener sus características típicos a pesar del paso del tiempo. En él podrás saborear la vida de la población del interior de Alicante y pasear entre sus casas encajadas en la roca. Este municipio fue declarado Conjunto Histórico-Artístico por la UNESCO en 1974 y se divide en dos zonas: el barrio del castillo (protegido por la antigua muralla y de corte medieval) y el barrio del Arrabal (creado posteriormente, debido al aumento de la población, que se instaló en las faldas de la montaña).

Este pueblo no podía faltar en la lista de lugares con encanto Comunidad Valenciana. Lo podrás encontrar en la zona norte de la Comunidad Valenciana, muy cerca de la costa. Preciosos paisajes, murallas centenarias, un castillo medieval situado a más de 1.000 metros de altura... convierten a este pueblo en un espacio que lo tiene todo para ofrecer la visión más prototípica (en el mejor de los sentidos) de un pueblo valenciano. También ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico, y el trabajo de rehabilitación llevado a cabo por su Ayuntamiento fue galardonado en 2011 con el Premio Patrimonio, concedido por el grupo de ciudades Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, en reconocimiento a "su esfuerzo en la recuperación y preservación de sus atributos culturales y monumentales".

Peñíscola cuenta con la particularidad de combinar la belleza de un precioso pueblo medieval con una rica vida cultural y una importante oferta de turismo de sol y playa. Su castillo Castillo Templario es uno de sus grandes atractivos, así como su entramado de calles de trazado medieval. También, por supuesto, el enclave en el que se ubica, adentrándose en el mar y rodeándose de él. Se trata, quizás, de la mejor opción para poner de acuerdo a toda la familia y contar con una oferta variada a todos los niveles. Sus playas son otro de sus grandes puntos fuertes: pasear por ellas y visitar su famoso faro te recargará las pilas.

Viajamos ahora hacia el interior hasta llegar a Vilafamés, un pueblo del interior de la provincia de Castellón que se encuentra a tan solo 25 kilómetros de la capital. Se encuentra en una zona elevada y destaca por su casco antiguo, por el que podrás pasear tranquilamente y respirar el ambiente de sus orígenes árabes. Calles estrellas y pedregosas, rincones de ensueño... y, cómo no, por su castillo, situado en lo más alto del pueblo. Destacan también su impresionante iglesia parroquial y su palacio del siglo XV, fruto de la expansión cristiana. En estas zonas posteriores, las calles son de trazado lineal.

Quien ha visitado Culla sabe que es un lugar único donde se unen naturaleza, paisajes de postal, calles preciosas, empinadas y medievales, junto con vestigios y casas de otra época, como si nos transportasen a otros tiempos pasados. Un recorrido por sus calles y monumentos te transportará y mostrará la Culla más medieval y mágica. Es una de las poblaciones más importantes del antiguo Reino de Valencia: su situación geográfica era privilegiada, dado que constituía la frontera entre Aragón y Valencia, un punto ideal para la expansión del Cristianismo.