La historia de un profesor de matemáticas que ha adoptado a uno de sus estudiantes para que pueda recibir un trasplante de riñón ha causado gran conmoción en Facebook. El pequeño Damien, de 13 años, ha estado entrando y saliendo del orfanato toda su vida, y ha padecido insuficiencia renal desde que tenía ocho años. El menor perdía constantemente su lugar en la lista de espera de un riñón, ya que los pacientes de trasplante deben tener una casa estable, y este no era el caso, según recoge 'La República'.
Desde septiembre del año pasado, Damien vivía con un familiar en Aurora, Colorado, y pudo comenzar las clases en la Academia AXL, donde se unió a la clase de matemáticas de Finn Lanning, donde el adolescente destacó por su brillantez y diligencia. Lanning se quedó atónito cuando este nuevo estudiante se le acercó al final del semestre para decirle que no regresaría. El pariente con el que vivía lo había devuelto a la atención del condado, lo que automáticamente le volvía a sacar de la lista de espera para un trasplante.
"Un trasplante es un proceso muy complejo; hay muchos medicamentos necesarios para mantener un trasplante saludable, por lo que los pacientes deben tener un sistema de apoyo", explica el Dr. Anthony Watkins, cirujano en NewYork-Presbyterian Center. "Necesitan una persona que pueda ayudar a llevarlos a las visitas", agrega. Además, la persona que designen debe comprometerse a estar cerca permanentemente, ya que un trasplante es una forma de tratamiento a largo plazo. Sin la esperanza de recibir un riñón, y con un estado tan grave, Damien tendría que mudarse para vivir en el hospital durante 12 horas al día para recibir diálisis, como solución temporal.
Cuando el profesor Finn Lanning escuchó que Damien abandonaría la escuela debido a factores fuera de su control, se ofreció a intervenir. Fue entonces cuando decidió adoptarlo. El maestro se postuló para ser el sistema de apoyo a largo plazo de Damien. En diciembre, comenzó a formarse en cómo cuidar a un niño con insuficiencia renal grave que requiere horas y horas en una máquina de diálisis en casa y una dieta severamente restringida que cuesta 200 dólares semanales.
Ambos llevan tres meses viviendo juntos; cocinan mucho y se entusiasman con la vida de Damien una vez que obtenga el nuevo riñón. Ahora el adolescente está en la parte superior de la lista de espera. Mientras, la comunidad trata reunir fondos con la plataforma GoFundMe para ayudar a Lanning a mantener a su hijo adoptivo.