La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Alicante, con sede desplazada en Elche, ha condenado a prisión permanente revisable a la pareja acusada de asesinar en 2018 a un niño de dos años, hijo de la procesada, en aplicación del veredicto de un jurado popular que los declaró culpable a él de palizas y de estrangular al niño, mientras que ella no lo impidió.
La sentencia, que puede ser recurrida en apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, declara a la madre del menor y a su compañero sentimental autores de un delito de asesinato con agravante de parentesco y de malos tratos habituales con agravante de alevosía.
Los hechos, declarados probados conforme al veredicto de un jurado popular, ocurrieron en el domicilio familiar, en la ciudad de Elche, donde la pareja residía junto al menor. Según el fallo, en distintos días, el acusado ejerció fuerza física sobre el pequeño, que no tenía capacidad para defenderse dada su corta edad, "propinándole todo tipo de palizas y golpes" --como bofetadas o puñetazos-- en distintas partes del cuerpo.
La acusada, pese a conocer esta situación, "lo consentía" y no hacía nada para evitarlo. El 13 de septiembre de 2018, el hombre, pese a conocer la "alta probabilidad de que se pudiera producir la muerte del menor y aceptándolo", propinó una nueva paliza al niño.
En concreto, le dio bofetadas y puñetazos y llegó incluso a estamparlo contra alguna superficie. Asimismo, le oprimió el cuello con tanta intensidad que le impidió respirar y le hizo perder la consciencia. La madre, que estaba en la vivienda mientras se producía la agresión, "lo consintió, no haciendo nada para proteger al menor e impedirlo", agrega la resolución de la Audiencia.
Los procesados, al darse cuenta de la gravedad del estado del niño, lo trasladaron al Hospital del Baix Vinalopó, donde falleció el 17 de septiembre. La autopsia determinó que la causa principal del fallecimiento fue una encefalopatía anóxica por estrangulamiento.
Los médicos pudieron constatar además las diferentes lesiones que presentaba el cuerpo del pequeño, como hematomas, eritemas o fracturas, a causa de los malos tratos que padecía de forma habitual. La magistrada que dirigió este juicio con jurado el pasado mes de septiembre impone a ambos acusados -a él como autor directo y a ella como autora por omisión- prisión permanente revisable por el delito de asesinato y tres años de cárcel por el delito de malos tratos habituales.
Asimismo, les condena a indemnizar conjunta y solidariamente con 150.000 euros al padre biológico del niño y con 70.000 a la abuela paterna, en concepto de daños morales. También deberán pagar cerca de 7.000 euros a la Conselleria de Sanidad por la atención médica prestada al menor.