El presunto asesino que acabó con la vida de un niño de nueve años en Lardero, La Rioja, va a ser trasladado de centro penitenciario.
Francisco Javier Almeida será conducido de la prisión de Logroño en la que se encuentra hasta la prisión de Segovia, un centro con más medidas de control.
El objetivo es evitar problemas con otros presos de la cárcel de Logroño en la que se encuentra ahora y garantizar así su seguridad.
Hasta el momento Alemida se encuentra aislado en una celda, siguiendo la normativa de cuarentena por covid. Además, se le ha aplicado el protocolo antisuicidio.
El presunto asesino del menor está vigilado por un preso de apoyo con el que tampoco establecerá contacto. El acusado será supervisado a través de un cristal de la celda contigua. La figura de estos presos de apoyo es clave para prevenir suicidios dentro de las cárceles.
Se desconoce el día exacto del cambio de prisión de Almeida por instituciones penitenciarias, pero ha trascendido a los medios de comunicación que el acusado del asesinato de Álex ha pedido hablar con el sacerdote de la prisión.
El acusado ha solicitado por escrito poder hablar con el cura y entrevistarse con él "a la mayor brevedad posible"