La policía municipal de Madrid llevará pistolas táser en las intervenciones que realicen. Son dispositivos que paralizan a las personas durante 5 segundos con descargas eléctricas. Con el dispositivo, las patrullas pretenden evitar incidencias y sobre todo aglomeraciones que se pueden producir estos días en la capital.
Las llevarán en los controles a conductores, en el transporte público o para identificar a peatones. Un plus de seguridad para los agentes que van a controlar que no se formen aglomeraciones en el centro de la ciudad, que nadie entre en Nochevieja a una Puerta del Sol que va a estar blindada.
150 pistolas eléctricas dotadas de una cámara que grabará cada intervención. En cinco segundos inmovilizan al agresor. Más de 250 policías municipales se han entrenado a conciencia para poder usarlas.
Además, los agentes dispondrán de unos guantes especiales para poder localizar armas ocultas, sin necesidad de cachear a nadie.
Cada policía también contará con un guante detector de metales para realizar cacheos sin que haya contacto físico. Son agentes que van a vigilar a los madrileños entre la zona centro y la periferia.