Los propietarios de explotaciones plataneras de la isla de La Palma afectados por la erupción del volcán de Cumbre Vieja han lanzado un llamamiento a las autoridades y consumidores para defender un sector económico que representa un tercio del PIB de la isla.
La colada de lava ha destruido muchas explotaciones y afectado el sistema de riego de estos cultivos que necesitan agua de forma constante para seguir produciendo.
Pero los agricultores se están encontrando con el problema añadido de las cenizas que estropea el fruto e impide su comercialización.
Las autoridades del Cabildo de La Palma trabajan ya con dos propuestas para garantizar el riego de los cultivos pero ninguna de ellas es a corto plazo. Está previsto la llegada de fondos para contruir desaladoras provisionales que ayude a cubrir las necesidades hídricas o para arreglar de forma urgente el sistema de riego destrozado por la colada de lava.
El sector cuantifica las pérdidas en más de 72 millones de euros y muchos agricultores reconocen que la ceniza les ha ocasionado pérdidas de hasta el ciento por ciento de sus cosechas.
Otros apelan a la solidaridad de los consumidores y los intermediarios para que mantega la cadena de comercialización de este fruto. Un llamamaiento a la unidad y la cooperación entre todos para que el plátano canario con origen en La Palma siga presente en las mesas de medio mundo.