Ha ocurrido en Ucrania. Este domingo, Richar Gorda, un pescador local ha logrado rescatar a un niño de 11 años aislado sobre un témpano de hielo arrastrado por la corriente del río Desenka, en Kiev. El hábil deportista quitó el anzuelo al sedal y con la plomada lanzó la caña hacia dónde estaba refugiado.
El joven se encontraba jugando con un compañero de colegio cuando la placa de hielo sobre la que estaba se separó del resto y quedó a la deriva cauce abajo alejándose unos 20 metros de la orilla. Sin saber nadar, el joven se precipitaba a un dramático final en las aguas heladas del Desenka.
Afortunadamente, la habilidad y los reflejos de Richard Gorda ha permitido salvarle la vida.
En el vídeo grabado por el mismo pescador, puede verse cómo Gorda le pide al menor que se mantenga tranquilo y en calma mientras prepara su caña quitándole el anzuelo y ajustado la plomada.
Posteriormente la lanza en dirección al témpano sobre el que permanece de pie el joven que logra asir el sedal lo que permite al pescador tirar de él y acercarlo lentamente hacia la orilla para ponerle a salvo.