La Guardia Civil ha trasladado la lancha desde el mar a la nave de los GEAS en el Marítimo de Tenerife. Ha sido examinada por los perros del Servicio Cinológico de la Guardia Civil que llevan tres días buscando restos biológicos. Los perros han intentado encontrar con su olfato lo que el ojo humano no vio. Pero no han hecho ningún marcaje. En la vivienda de Tomás después de dos días de búsqueda sí hicieron varios marcajes que se están analizando, aunque las tres catas del jardín fueron negativas. Habrá que esperar a que el laboratorio analice.
El coche fue abandonado en el puerto por Tomás antes de irse al mar el día de la desaparición. El vigilante que abrió la barrera del puerto no vio a Anna y Olivia en los asientos, y en las cámaras de la dársena no se las vio embarcar con su padre. Por eso la Guardia Civil rompió la ventanilla para acceder al maletero, pensando que las niñas podían estar ahí. Fue nada más denunciarse la desaparición en la mañana del miércoles y comprobar que no había vuelto. Los perros han buscado el rastro de Anna y Olivia, y no han encontrado nada. La investigación sospecha que las niñas pudieron ir en bolsas de basura, dentro de los petates que Tomás sacó del coche y embarcó en la lancha.
En la barca ya había tomado muestras pero criminalística solo encontró sangre del padre. Ni un solo resto biológico de las niñas. Hoy los perros tampoco han marcado. La esperanza que tenían los investigadores era que Bill y Junco marcaran porque podía significar que estuvieron vivas y eso reactivaría la hipótesis de la fuga. No ha sido así, pero tampoco han encontrado elementos que hagan pensar que estuvieron muertas en la barca. El cuñado de Tomás, presente en los registros, no ha querido mandarle ningún mensaje. “No sabemos nada, no sospechamos nada, ahora paciencia a esperar que dice la Guardia Civil”, ha explicado.
Todos albergan esperanza, también la madre de las pequeñas que publica un nuevo vídeo de sus hijas en el que la mayor de seis años acaricia a su hermana al tiempo que expresa su deseo de estar “juntas para siempre”. Beatriz quiere mantener activa la búsqueda internacional de las pequeñas y esa es la manera. “Tres semanas... ya no me salen casi las palabras, yo también quiero desaparecer. Ya no tengo fuerzas, esto es una tortura. Pero no podemos rendirnos. Las niñas me necesitan y yo a ellas...”. Pide que todos compartamos el vídeo y actuemos como una gran familia para encontrarlas.