Peluquerías, tintorerías y lavanderías permanecerán abiertas durante los 15 días que dure el estado de alarma por el coronavirus. Se consideran de primera necesidad al igual que farmacias, supermercados o estancos, entre otros negocios. Sin embargo, el hecho de mantener los salones de belleza en activo en estas circunstancias no es fácil y prueba de ello es la queja de una peluquera de A Coruña que no ha tardado en hacerse viral.
Apelando directamente al presidente del Gobierno, Pedro Sáchez, y a los ministros, expone una serie de circunstancias por las que su peluquería no abrirá las puertas durante esta crisis: "cómo guardo un metro de distancia" a la hora de peinar, lavar..., "cómo puedo hacer un secado con guantes", "no hay geles, no hay mascarillas". En definitiva, "cómo hago para no exponer a las clientas", expresa porque "a mí todo esto en la academia no me lo enseñaron".
Pero, más allá del propio desarrollo del trabajo con las medidas de seguridad que se han establecido, la peluquera revela un problema real: la imposibilidad, si abre, de atender a su hijo ya que "con los abuelos no se pueden quedar".
Y, aprovecha las circunstancias para, como autónoma, plantear una queja: "Si la peluquería es de primera necesidad, ¿por qué no nos baja el IVA a como lo teníamos?".
“Ya está bien de pisarnos la cabeza. Somos autónomos que estamos sobreviviento y malviviendo", añade. "Su sentido común dónde está", ha estallado antes de concluir, "somos un sector unido, señor Sánchez, muy unido y no nos vamos a cansar de gritar. Ya está bien. Somos peluqueros, no superhéroes. Y si somos de primera necesidad para unas cosas, tenemos que serlo para todo".