Los vecinos han llamado a la policía de Castellón porque un hombre se había tirado por la ventana. Cuando los agentes han llegado a la calle Río Adra, el hombre había fallecido.
Al subir a la vivienda, los agentes se han encontrado a las menores, de dos y seis años, acuchilladas. La madre no reside en este piso, ya que la pareja estaba en proceso de separación.
016, EL TELÉFONO CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO
De hecho un vecino y amigo de la pareja ha contado que se llevaban muy mal y que él se había convertido en el paño de lágrimas de la pareja. Estaban a la espera de la celebración de un juicio. Ella lo había denunciado después de que la amenazara con matarla según este vecino.
Desde el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) han añadido que tanto la madre como la abuela, al recibir la noticia, han sido trasladadas a un centro hospitalario para recibir atención psicológica.
Desde el ministerio de Presidencia e Igualdad se considera este doble crimen como un nuevo caso de violencia de género con lo que ya son 960 las mujeres asesinadas por esta causa desde 2003 y 27 los menores desde 2013.
Dos denuncias por violencia machista archivadas
En el Juzgado de Violencia sobre la Mujer constan dos procedimientos -uno por denuncia por amenazas interpuesta por la exmujer del presunto parricida y madre de las menores y otro abierto tras recibir un parte médico-. Ambos se archivaron a petición del fiscal y de la propia víctima.
La diligencia policial de valoración de riesgo de la víctima arrojó un resultado de riesgo bajo. El investigado, ahora fallecido, no tenía antecedentes penales ni le constaban episodios previos de violencia doméstica. Ahora su muerte extingue la responsabilidad penal.
La primera causa se incoó el pasado mes de enero. El Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Castellón abrió un procedimiento tras recibir un parte médico, sin denuncia de la víctima. En su comparecencia, la mujer y madre de las menores se acogió a su derecho a no declarar. Sin parte de lesiones y sin el testimonio de la víctima, el fiscal solicitó el sobreseimiento de la causa y el Juzgado la acordó.
El pasado mes de febrero, el día 24 la mujer lo denunció por amenazas. Lo hizo apenas quince días después de que el Juzgado de Familia fijara medidas provisionales para regular el régimen de visitas y el uso de la vivienda en base al convenio regulador que los padres habían alcanzado de mutuo acuerdo.
Tras una discusión con su exmarido cuando procedían a intercambiarse a las niñas, la mujer interpuso la denuncia, solicitó una orden de alejamiento y mostró su disconformidad con las medidas provisionales.
El fiscal no consideró entonces necesaria la adopción de medidas cautelares y se opuso a la concesión del alejamiento. El Juzgado de Guardia denegó la orden. Al día siguiente, la decisión fue revisada por el Juzgado de Violencia Sobre la Mujer de Castellón y se vuelve a denegar la orden de alejamiento. La denunciante recurrió esa decisión judicial, pero mientras se tramita su recurso desistió de seguir adelante y el auto denegatorio de la orden de alejamiento cobró firmeza.