Ya son 23 días sin noticias de Esther López, la joven desaparecida en Traspinedo. La Guardia Civil centra ahora todos sus esfuerzos en encontrar su teléfono móvil. Su familia, ha difundido un vídeo, con el que busca remover conciencias. Quieren saber qué le pasó a Esther.
“Yo si espero volver a ver a mi hija pero de ahí a verla con vida…”. Con estas palabras el padre de Esther López, Miguel, ruega a los que saben qué ocurrió que hablen por favor.
La Guardia Civil trabaja en saber qué hizo Esther López las últimas horas antes de desaparecer. Buscan en pozos en el área delimitada en el informe de aproximación de la antena de la compañía telefónica a la que se enganchó el móvil de la mujer esa noche.
Y siguen muy de cerca a los sospechosos. Comprobar que su amigo Óscar no estaba donde dijo le ha puesto en el punto de mira. Los investigadores creen a Carlos, que contó que se bajó del coche donde iba con Carlos y Esther cerca de su casa. Sus hijos han asegurado que durmió con ellos.
Sin embargo, la versión de Óscar no cuadra para la Guardia Civil. El contó que discutieron y que ella se bajó enfadad en un bar. Sin embargo, Óscar no durmió donde dijo y aunque en su coche no se ha hallado nada, a los investigadores les ha llamado la atención que el coche estaba demasiado limpio, ni una mota de polvo.
La Guardia Civil se afana en hallar el móvil de Esther con detectores de metales. Para trazar un recorrido exacto de sus movimientos lo necesitan.
Con la copia de seguridad del móvil no tienen las últimas horas y estas son cruciales. Desde que los dos amigos sospechosos dicen que dejaron a Esther hasta que se apagó el teléfono de la joven, pasaron tres horas, de 3 a 6 de la mañana, en las que no se sabe qué pasó con Esther López.