Otilia, el ángel de la guardia de los sintecho: con 85 años, reparte cada día alimentos en Ourense

  • Desde el inicio de la pandemia se han multiplicado las colas del hambre

  • Casi la mitad de quienes esperan las colas jamás habían necesitado ayuda

  • El perfil medio es una mujer de 44 años con hijos menores de 16

A veces la pandemia nos descubre a personas tan solidarias como Otilia, una monja que a sus 85 años se ha convertido en el ángel de la guarda de mucha gente necesitada de Ourense. Cada día lleva a los sintecho piezas de pan y de fruta y otros alimentos de su convento. Desde la pandemia las colas del hambre se han multiplicado. Solo en el último año, Cruz Roja ha atendido a 3 600 000 personas necesitadas de ayuda para comer.

Casi la mitad de quienes esperan en las colas del hambre jamás habían necesitado ayuda y el perfil medio ha cambiado por completo, ahora es una mujer de 44 años y con hijos menores de 16 años.

“Yo trabajo en la hostelería y ahora... chunga, chunga la cosa”, lamenta un hombre. Mientras que otro admite que esta situación es nueva para él. “Yo llevo poco tiempo, llevaré unos tres o cuatro meses”, confiesa.

“Mi vida era totalmente diferente, era de mi hijo pedirme unos botines y yo decirle.. sin ningún problema, comprárselo, y ahora pues...”, cuenta una mujer.

La mitad de los afectados son niños

Además, la mitad de quienes no tienen ni para comer en nuestro país son niños. En este sentido, Carmen Ruiz, de la Asociación de Vecinos Tres Barrios: "Teníamos unos expedientes de unos 220 familias y ahora los hemos triplicado"

Muchos se libran del hambre gracias a iniciativas como la de Otilia que reparte lo que tiene con su carro. "Yo pienso: con agua y pan ya no muere nadie", confiesa la monja, de 85 años. "Me trae pan y a veces fruta. no es comida que le den a ella para repartir, es de lo que tiene", cuenta uno de los sintecho a los que ayuda.