El obispo de Alcalá de Henares acusa al Gobierno de convertir a España "en un campo de exterminio"

El obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla, ha escrito una polémica carta pastoral tras la reciente aprobación de la ley de eutanasia en la que arremete con dureza contra el Gobierno de Pedro Sánchez por haber convertido a España "en un campo de exterminio".

Los socialistas de la localidad han reaccionado exigiendo que el obispo pida "perdón por sus inaceptables declaraciones", y reclamando "que deje de proferir sus ya demasiado habituales exabruptos verbales". Para el PSOE de Alcalá de Henares, el obispo está "más empeñado en polemizar, polarizar y dividir" a la sociedad, que en "avanzar y profundizar en la concordia que predica la fe cristiana".

En la carta, publicada el pasado 19 de marzo, el prelado insiste en que "el Ejecutivo ha conseguido –con la aprobación de leyes que permiten destruir la vida por nacer, tanto en el seno materno como en los laboratorios, y ahora con la aprobación de la Ley de la eutanasia– convertir a España en un campo de exterminio".

Además, dice que el actual Gobierno, al que califica de "bárbaros", le "tenía ganas" a la España "tradicionalmente católica" y que, "embriagados de poder", no entienden el significado del "hogar familiar que ha significado y significa España".

"La puntilla final"

Reig Pla insiste en que existe una estrategia perfectamente calculada para llevar a España a "un tsunami de leyes que desregularizan el patrimonio cultural y espiritual de España". Entre esas leyes el obispo cita varias –la del divorcio, pasando por la despenalización del aborto o el matrimonio igualitario.– hasta llegar a "la nueva ley de educación y la ley de eutanasia", "la puntilla final".

Para Reig Pla estas leyes suponen que "las fuerzas globalistas, los lobbies financieros, sus terminales eutanásicas y el laicismo militante pueden darse por vencedores ante un pueblo anestesiado por los medios de comunicación, la fuerte ingeniería social desarrollada con la perversión del lenguaje", y por "un Tribunal Constitucional atrapado por el positivismo jurídico y que deja en desamparo lo que naturalmente constituye lo específicamente humano".

"Los nuevos amos han provocado desde las instancias del poder un debilitamiento moral de nuestro pueblo, especialmente entre los niños, adolescentes y jóvenes con una educación sexual al margen del amor", señalando la pornografía, las adicciones de toda clase y una "autonomía radical del individuo" que lleva a la "destrucción de la libertad en nombre de una libertad sin más contenido que ella misma", añade en su carta pastoral.

España se convirtió el 18 de marzo en el séptimo país del mundo donde la eutanasia será legal tras aprobar definitivamente la ley que regula la ayuda médica para morir como derecho y prestación sanitaria gratuita, con el apoyo de la izquierda y otras fuerzas y la oposición frontal de la derecha.