Los rastreadores siguen la cadena de contagio para contener la pandemia de coronavirus, pero el número de profesionales contratados es insuficiente para los ayuntamientos. Hay 120 contratados hasta el momento en toda Cataluña, una comunidad de 7 millones y medio de habitantes, en la que los rebrotes no cesan y donde los contagios superan solo en las últimas horas los 1 200. En Madrid hay 126 rastreadores, en Euskadi, 180 y en Castilla y León 312 para 2 millones y medio.
Si nos fijamos en otros países comprobamos que el número de rastreadores es bastante inferior en España. La clave del éxito en Alemania, precisamente, es ese sistema de rastreo. Cuentan con 20 profesionales por cada 100 000 habitantes, aún mayor es el número de estos profesionales en Reino Unido, donde pretenden alcanzar los 26 por cada 100 000.
Por tanto, atendiendo a esas cifras, en Cataluña se necesitarían más de 1500 rastreadores y en Madrid más de 1300, un número muy superior al de los que hay actualmente.
El sistema de vigilancia epidemiológica es fundamental. Sin embargo, lejos quedan esos números de lo recomendado por la Universidad Johns Hopkins, que situó en 81 los rastreadores necesarios por cada 100 000 habitantes. Solo lo cumpliría y mejoraría Andalucía, que afirma tener a más de 8000 profesionales trabajando en la red de rastreo.
El jueves, la consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, anunció que reforzarán el circuito de detección de casos de coronavirus con 500 'gestores Covid-19' para "reducir el tiempo" del proceso de identificación y aislamiento de contactos. Lo hizo en rueda de prensa en la que también han participado el director de la Agència de Salut Pública de Catalunya, Xavier Llebaria, y el coordinador de la unidad de seguimiento del Covid-19 en Catalunya, Jacobo Mendioroz.
La mayoría de los 'gestores Covid-19' serán nuevas contrataciones aunque "dependerá de en qué equipo y zona actúen", la cifra inicial mínima de 500 personas será escalable en función del impacto de la pandemia y trabajarán desde la atención primaria.
Serán los encargados de la identificación de los contactos de aquellas personas que todavía no han dado positivo, pero que están bajo sospecha y pendientes del resultado de la prueba, así como de las preguntas de inicio de síntomas para tratar de trazar el origen de la infección.
De esta manera, el circuito del seguimiento de la pandemia en Catalunya estará integrado por 180 rastreadores de la red de vigilancia epidemiológica, la nueva incorporación de los 'gestores Covid-19' y las 120 personas 'scouts' encargadas del seguimiento telefónico.
Vergés ha recalcado que "las personas que están en 'callcenters' no rastrean, hacen el seguimiento de los contactos que ya están identificados y trazados", con una cifra escalable hasta las 900 personas en función del impacto de la pandemia y que actualmente siguen a cerca de 13.000 contactos con una media de 1.700 llamadas al día.
Siempre se contacta vía telefónica con la persona que ha dado positivo en coronavirus. A partir de ahí, hay que apelar a su memoria para ver por dónde se ha movido los 14 días anteriores. La mayoría colabora pero los rastreadores también se encuentran con personas que mienten, ocultan información o simplemente tienen lapsus.
La labor de rastreo la hacen especialistas en medicina preventiva. Ellos son los que se encargan de inmovilizar a los que han estado en contacto con el positivo. Hasta 25 personas si ha sido en un medio de transporte. Pese a que supone un trastorno, es la forma más efectiva de frenar los brotes.