Jornada clave la de ayer en el juzgado de Tui sobre la desaparición y asesinato de Deborah en Vigo con la declaración de seis testigos. Un caso de hace 17 años, que ha sido reabierto hace apenas un mes tras una nueva investigación policial.
La familia de Deborah ha luchado hasta el final para evitar que el caso prescriba y lo ha conseguido 17 años después.
Deborah desapareció cuando hacía deporte en la zona de Samil en abril de 2002. Su cuerpo fue encontrado en una cuneta 10 días más tarde. Su hermana cree que la mataron en otro lugar y después trasladaron el cuerpo.
Ya han pasado seis testigos por los juzgados de Tui. Entre ellos, los padres del exnovio de Deborah, el principal sospechoso, que nunca fue detenido aunque su declaración estaba llena de contradicciones.
El día de su desaparición se iban a reencontrar tras una crisis.
Una familia, la de Deborah, con mucho coraje que sigue luchando para que se haga justicia.