En las últimas semanas toda España está realizando el esfuerzo de quedarse en casa en esta cuarentena. Para algunos, esto supone un gran sacrificio que viene acompañado por quejas e incumplimientos. Lamentos que no entienden Noa y Carla, que llevan cuatro meses sin salir del hospital aquejadas de piel de mariposa.
Ambas afirman que "ellas no se quejan" a pesar de llevar más tiempo encerradas y que el encierro "es por nuestro bien" y desde su habitación nos dan una orden que debemos cumplir todos por solidaridad con todos "quédate en casa".
La enfermedad que sufren es piel de mariposa; una dolencia poco frecuente e incurable provoca una extrema fragilidad de la piel y las mucosas. Se hereda de forma genética y es crónica. El ejemplo de estas niñas debería servir para que todos sigamos sumando nuestro granito de arena en esta crisis.