Noa, una bebé de 14 meses con una enfermedad rara pulmonar, supera el Covid-19 tras dos semanas en la UCI

  • Noa pasó 15 días en la UCI en los peores momentos de la pandemia y sin sus padres, también infectados

Esta es la historia de Noa, una bebé de 14 meses con una neumopatía intersticial, una enfermedad genética que afecta a los pulmones, que se ha convertido en la ganadora más joven en la batalla contra el coronavirus. Fue dad de alta tras permanecer dos semanas ingresada en estado grave en la UCI pediátrica del barcelonés Hospital Vall d'Hebron. "Está hecha un torbellino", dice su madre ahora, encantada con tener a Noa en plena forma. Sedada y sola estuvo dos semanas, luchando con ese cuerpecillo contra un virus que ha acabado con la vida de muchos. "Nació a la semana 29 por lo que su punto débil era el pulmón". Ahora sus padres, ambos contagiados en ese momento por lo que no pudieron verla, recuerdan cómo se encontraron a la pequeña, llena de moratones por los análisis que la debían hacer. No reconocía a sus padres.

La bebé ahora está en su terreno, en Amposta, Tarragona. Ya no quedan en su cabeza los recuerdos del ingreso el pasado 16 de marzo por coronavirus en el Hospital Joan XXIII de Tarragona. Para conmocióin de sus padres cinco días después fue derivada al Vall d'Hebron al empeorar y presentar afectación cardíaca.

"La paciente estaba con ventilación mecánica, tenía neumonía en los dos pulmones debido al Covid-19 y desarrolló un cuadro grave poco frecuente en pacientes pediátricos", recuerda el jefe de la UCI pediátrica del Vall d'Hebron, Joan Balcells.

"A pesar de su grave afectación pulmonar de base, Noa presentó una buena evolución clínica, lo que diferencia a los pacientes pediátricos de los adultos, quienes, desgraciadamente, suelen presentar un pronóstico mucho peor en circunstancias similares", ha señalado el jefe de Enfermedades Infecciosas e Inmudeficiencias de Pediatría del mismo hospital, Pere Soler.

Tras dos semanas en la UCI del Vall d'Hebrón, Noa mejoró y fue derivada de nuevo al Joan XXIII de Tarragona, más cerca de su domicilio, donde fue dada de alta, una vez superada el Covid-19.

La pequeña ha tenido que hacer rehabilitación para terminar su recuperación de la atrofia por desuso de la musculatura tras el ingreso hospitalario, y los padres han expresado su agradecimiento a todo el personal sanitario que ha atendido a su hija.

Víctor Blanch y Gina Bou, celebran que su hija se ha curado y quieren mandar un mensaje de ánimo a todos esos padres que pueden encontrarse en una situación similar a la suya. Ahora ver a la niña es otra historia, no para y hasta intenta quitarse el respirador. Vuelve a ser el bebé que fue. Una luchadora.