El coche de su padre ahora tapado por la lona de la Policía de Nueva York se convirtió en un horno mortal para Mariza y Phoenix, dos mellizos de solo 11 meses, que fallecieron el viernes debido a las altas temperaturas al ser olvidados en el asiento de atrás del vehículo en el distrito del Bronx.
Su padre, de 37 años, tenía que llevarles a la guardería antes de irse al trabajo, algo que no hacía de forma habitual. En vez de eso, atravesó el Bronx hasta el Centro Médico de Administración para Veteranos, donde es trabajador social, y aparcó como cada mañana a las ocho.
Al salir no se dio cuenta de que los bebés se quedaban en el asiento trasero. Atados en sus sillas, con el coche herméticamente cerrado. Su padre no se percató de lo que había ocurrido hasta que salió de trabajar y arrancó el automóvil.
Regresó al coche ocho horas después. Al poner la llave en el contacto se dio cuenta de la tragedia. Llamó a la Policía y solo pudo emitir un grito desgarrador. Cuando llegaron los agentes y sanitarios, certificaron la muerte de los pequeños, que presentaban alarmantes muestras de deshidratación.
El hombre está siendo investigado mientras que el hijo mayor de la familia, de tres años, está bajo la custodia de la madre.
Ignacio García-Juliá, presidente del Foro de la Familia, asegura que estos casos se producen ante "un síntoma de un problema más profundo. La verdad es que denota el desbordamiento que hoy en día sufre la familia al tener que atender a múltiples obligaciones sin tiempo para la reflexión o para priorizarlas".
Sin embargo, Salvador Cardús, profesor de Sociología, asegura que "olvidar a una criatura en un coche no puede deberse solo a la prisa, habrá otras razones que evaluar, porque prisas las tenemos todos y noticias como esta no son tan comunes".
Por su parte, el profesor de Psicología Molecular de la Universidad del Sur de Florida, David Diamond, advierte que aunque los padres piensan que estos accidentes nunca les sucederán a ellos, "la memoria es bastante defectuosa".
El profesional que comenzó a estudiar el asunto de estos olvidos fatales entrevistando a muchos padres ha descubierto que siempre hay varios factores en común ya que, normalmente, se refieren "a experiencias estresantes antes o durante del viaje, muchos hablaron de privación de sueño."