Los niños españoles que estudian la educación Secundaria (entre 12 y 17 años) pasan una media de 1.058 horas y media al año conectados a Internet, cuatro horas y media más del tiempo que pasan en el colegio (1.054 horas).
Así se desprende del estudio 'Familias hiperconectadas: el nuevo panorama de aprendices y nativos digitales', elaborado por Qustodio, en colaboración con Ipsos. La investigación se basa en 1.220 entrevistas a padres y madres de niños entre 5 y 17 años de toda España; 1.190 en Estados Unidos; y 1.225 encuestas en Reino Unido.
El informe, hecho público este martes 22 de octubre en Madrid, estima que los niños españoles de entre 5 y 11 años (Educación Primaria) pasan una media de 711 horas y 45 minutos al año conectados a la red, es decir, 80 horas y 15 minutos menos que el tiempo que dedican a la escuela (792 horas). En este sentido, el estudio apunta que los menores españoles de entre 5 y 11 años pasan una media de una hora y 57 minutos diarios en Internet, mientras que los niños de 12 a 17 años dedican u a media diaria de dos horas y 54 minutos.
Por regiones, las comunidades de Canarias y Murcia son en las que los niños pasan más tiempo en Internet con una media de tres horas y 18 minutos; frente a Cantabria y La Rioja que se sitúan por debajo de la media nacional, con una hora y 54 minutos al día
Preguntado por las causas de que se den estas diferencias por regiones, el vicepresidente de Producto de Qustodio, Manuel Bruscas, ha explicado que se debe a "varios factores" que tienen que ver con la edad de los padres y la de los niños, el tipo de vida que llevan y las particularidades de cada familia. El estudio aborda también el tiempo que se pasa en familia y muestra que los padres españoles dedican una media de ocho horas al día a estar con sus hijos, cifra que durante el fin de semana se sitúa en 11,4 horas y de lunes a viernes en 6,5 horas.
En este aspecto, un 16 por ciento de los padres se queja de no poder dedicar el tiempo suficiente a sus hijos por su trabajo, porcentaje que se eleva entre los padres de 25 a 34 años, y que afecta más a los padres (21%) que a las madres (12%). También, un 84 por ciento de los progenitores intenta pasar tiempo de calidad con sus hijos, hablando o jugando (79% de los padres, frente al 88% de las madres).
Respecto a los hábitos de los padres, el estudio muestra que el 38 por ciento de los españoles (36% en Estados Unidos y Reino Unido) reconoce su dependencia al móvil, y que afirman pasar una media de 3,2 horas al día conectados. Así, la mitad de los progenitores en España considera que se relaciona menos con su familia por este hábito y el 80 por ciento se siente mal por ello. Durante la presentación se ha puesto de relieve que mientras los niños --nativos digitales-- entienden la tecnología como una parte más de sus vidas que les acerca y une con el resto del mundo, los padres --aprendices digitales-- han tenido que adaptarse e incorporarla en su día a día.
Los resultados de este informe muestran que la mayoría de los padres españoles se conectan a Internet a través de smartphones y ordenadores, de forma que en los hogares hay una media de tres teléfonos móviles, de los que uno pertenece a un menor. Además, en una de cada diez casas hay cinco o más smartphones.
Según el informe, la mayoría de las familias en España están compuestas por cuatro miembros (87%), seguida de las familias numerosas (9%) y las monoparentales (4%). Asimismo, las familias españolas tienen una media de 1,6 hijos. En relación con los modelos de crianza, el estudio indica que los padres españoles son menos estrictos que los británicos y los estadounidenses. El 36 por ciento de las familias en España se considera estricta, frente al 47 por ciento que lo afirma en Estados Unidos y Reino Unido; y el 64 por ciento de los padres españoles se ven flexibles y destacan la importancia de que sus hijos sean autónomos. En este contexto, la investigación revela que en España los padres más jóvenes son los más estrictos.
En general, el 85 por ciento de los progenitores afirma ser más rígidos con las tareas del colegio, las obligaciones de casa y el tiempo que los niños dedican a Internet (56%), mientras que se ven más flexibles con la alimentación (58%), las horas que dedican a ver la televisión o a los videojuegos (52%) y la hora de irse a dormir (46%). Sobre el uso de la tecnología por parte de los padres para tratar de entretener a los menores en determinadas circunstancias, El estudio revela que el 46 por ciento de los padres españoles no conoce ninguna herramienta de control parental, pese a que su uso ha crecido un 10 por ciento en siete meses.