Multas de 300 euros por dejar la sombrilla en primera línea de playa en Torrox
Las sombrillas son enviadas a un depósito municipal
Levantarse bien temprano para clavar la sombrilla en la arena y guardar el sitio en primera línea de la playa es un práctica que está prohibida ya por muchos ayuntamientos. Por ejemplo en Torrox, donde el ‘comando sombrilla’ llega a la playa para detectar a aquellos listos que intentan guardarse un sitio en primera línea al lado de la orilla y para multarles con 300 euros por su acción. En esta localidad cada año se embargan unas 300 sombrillas.
Los agentes primero detectan las sombrillas abandonadas, luego preguntan a los testigos por los posibles dueños y en caso de que no aparezcan los agentes elaboran un acta documentada y dos horas después, tiempo más que suficiente, proceden a la retirada de los enseres “abandonados”.
La sombrilla se lleva a un vehículo y es llevada al depósito municipal, igual que un coche mal aparcado hay que pagar por retirarla. Los dueños deberán pagar unos 30 euros por las molestias. Por eso, son muy pocos los que se animan a recuperar su sombrilla.