Danielle Martin, una mujer irlandesa de 32 años, estaba embarazada de tan solo nueve semanas cuando contrajo el coronavirus que la mantuvo durante dos semanas en coma inducido. Su marido, Bryan Green, llegó a temer por su vida y por la de las gemelas que, meses después, han visto nacer. “Son un milagro. Nuestras princesas”, ha expresado.
Danielle fue ingresada el 30 de marzo por neumonía grave. “Al principio, solo tenía dolor de garganta que me provocó problemas en el pecho y pensé que debía ser una infección, pero apenas podía respirar después de seis días. Sentí que me estaba asfixiando, así que Bryan decidió llamar a una ambulancia que llegó en cinco minutos”, explica.
Pero, una vez allí, le hicieron la prueba del coronavirus y dio positivo. Entonces, necesitó la ayuda de un respirador e, incluso, le tuvieron que inducir el coma cuando sus niveles de oxígeno bajaron, según publica el diario Daily Mail.
Cuando Bryan Green se enteró del estado de salud de su mujer, se quedó “sin palabras”. Los médicos se lo comunicaron por teléfono y cuenta que, tras colgar, rompió a llorar. Le dijeron que era probable que perdiese el bebé que esperaban. Por aquel entonces, ni siquiera le habían hecho una ecografía y no sabían que estaba embarazada de gemelos. “Fue realmente aterrador”, recuerda.
Pero, en contra de todo pronóstico, diez días después de esa llamada, Danielle se recuperó y salió del coma con más de una buena noticia: la trasladaban a planta y, estaba embarazada de gemelas.
Meses después de lo que fue una auténtica pesadilla, Danielle y Bryan se encuentran en su casa con sus cinco hijo: Jaiden, Parker, Joshua y las dos gemelas, Ava y Amelia que nacieron sanas el 7 de octubre.