Muere la cuñada de Saray Montoya, hija y hermana de sus agresores, tras una cesárea e infectada de coronavirus

  • La cuñada de Saray Montoya, exconcursante de 'Supervivientes', ha fallecido

  • La mujer de 36 años tenía coronavirus y estaba embarazada

  • La joven era hija y hermana de los dos hombres acusados de agredir a Saray

La cuñada de Saray Montoya, Pilar Rubio Salguero, ha fallecido a causa del coronavirus a los 36 años de edad. La joven era hermana de Jorge Rubio, el marido de la exconcursante de 'Supervivientes', hija y hermana de los dos hombres acusados de propinar una brutal paliza a Saray.

Según ha informado el Español, Pilar estaba embarazada y se le tuvo que practicar una cesárea de urgencia para salvar la vida de su bebé antes de tener que trasladarla a la UCI, donde finalmente ha fallecido en el Hospital Virgen del Rocío.

Detenidos el suegro y el cuñado de Saray Montoya por la brutal agresión

La Policía Nacional ha detenido al suegro y al cuñado de Saray Montoya como presuntos autores de la brutal agresión a puñaladas sufrida por la mujer y su familia el pasado 23 de julio en Sevilla.

Según informa el Diario de Sevilla, los dos acusados se han entregado en la comisaría de Sevilla Este después de que la víctima acudiera este jueves a los juzgados para declarar contra su familia política por el intento de asesinato, intentando que se haga justicia tras las 15 puñaladas que le propinó presuntamente el hermano de su marido y que pudieron costarle la vida.

Los dos detenidos han prestado declaración y se encuentran en dependencias policiales. Ambos están siendo investigados por las lesiones sufridas por Saray, su hija Naiara, su madre y una prima.

Hasta la fecha, Saray ha conseguido una orden de alejamiento contra su cuñado y su suegro, que no podrán acercarse a ella ni a su hija Naiara a menos de 200 metros ni tener ningún tipo de comunicación con ellas hasta que se resuelva el caso.

Pese a esta primera 'victoria' en los tribunales, una "emocionada" Saray abandonaba los juzgados sin poder dejar de llorar y, confesando que confía en la justicia y que está "muy satisfecha" porque el juez le ha dado la razón al concederle una orden de alejamiento contra su familia política.

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