La Policía de Mineápolis mantuvo cercada la casa donde un hombre armado se ha atrincherado con su exmujer. Antes de encerrarse en la vivienda mató a los dos niños que estaban jugando en la nieve en el patio delantero de la casa.
Los vecinos relataron el horror que vivieron y los disparos del asesino, que terminó quitándose la vida antes del asesinar a su expareja y los hijos de esta. "Los agentes, bajo su propio riesgo, sin ningún tipo de protección, trataron de auxliar a esos niños", explicó el portavoz de la policía de Minéapolis, John Elder, " Pudieron llevárselos a los coches patrullas", según ha publicado la web de la cadena Fox.
Los agentes también escucharon disparos en el interior de la vivienda, mientras los negociadores intentaban hablar con el sospechoso y se desalojaba a los vecinos.
Horas después, los miembros de las fuerzas especiales introdujeron un robot para saber qué estaba pasando en la casa y vieron los dos cuerpos sin vida, el de una mujer y del sospechoso, la pareja estaba en trámites de divorcio.