El brote por coronavirus está despertando la preocupación de la población mundial. Ante la expansión que se está produciendo en Italia, los países europeos comienzan a estar más en alerta. En España, el ministerio de Sanidad ha convocado una reunión de urgencia para tratar nuevas medidas preventivas y han recomendado que, en caso de querer usar mascarilla, se utilice el modelo FFP2 (N-95), un producto que también ha recomendado la Organización Mundial de la Salud, OMS.
La OMS ha alertado de la “escasez crónica de equipos de protección personal” frente al brote por coronavirus. Además, ha destacado que las mascarillas son de uso prioritario del personal sanitario que trata a pacientes y posibles casos sospechosos. Las mascarillas se categorizan en tres tipos, según la normativa europea (norma EN149). La protección de cada mascarilla dependerá del nivel de filtración y su eficacia.
- FFP1: ofrece una filtración del 78% -estimado-
- FFP2 (N95), la recomendada por Sanidad y OMS: ofrece una filtración máxima entorno al 92%
- FFP3: ofrece una filtración del 98% -estimado-
La venta de mascarillas en España se ha disparado en las farmacias. Tal ha sido la explosión que sólo en enero se vendió el 32% de todas las vendidas durante los doce últimos meses -346 000 unidades por cerca de tres millones de euros-. De hecho, las peticiones de mascarillas se han incrementado en un 10 000% durante la primera semana de febrero respecto al mismo periodo de 2019.
La mascarilla FFP 2 (N-95) se recomienda por su buena fijación a la piel y su alta eficacia para filtrar las partículas en el aire. Son desechables y no reutilizables. Sin embargo, resulta imposible encontrar un ejemplar de este modelo, por lo que la población compra cualquier mascarilla –y no son efectivas–.
Las farmacias destacan la dificultad de encontrar una FFP2, según publica el CorreoFarmacéutico. “Al principio la gente venía buscando una mascarilla concreta, el modelo N95, pero está agotada a nivel mundial. Se llevan la mascarilla que tengamos, pero no tenemos más”, comentaba la responsable de una farmacia de Usera, Madrid.
Desde Bidafarma, la segunda mayor distribuidora española de productos farmacéuticos, han explicado que, en lo que va de año, la demanda que ha recibido de mascarillas ha crecido de forma interanual en un 3 200% y ha elevado sus ventas de estos productos en un 250%.
“El primer modelo de mascarilla –FPP1– no se puede utilizar porque tiene el agujero demasiado grande, tiene una filtración insuficiente. La mascarilla que ha recomendado el Gobierno está totalmente agotada desde hace meses, tanto el modelo FFP2 como el FFP3. Tenemos muchísimos pedidos pendientes”, comenta un empleado de RS Components, compañía de venta online, a Informativos Telecinco. Encontrar el modelo indicado para ser prevenido ante la alerta mundial resulta imposible.
- Lávate las manos, mucho y muy bien. Se trata de una medida tan simple como efectiva, sobre todo teniendo en cuenta que los síntomas de esta enfermedad pueden tardar en darse entre 1 y 14 días. No basta con un lavado rápido. Lo ideal es hacerlo como si de un cirujano se tratara, incidiendo en todas las áreas de tus manos y haciéndolo durante al menos un minuto. Hazlo varias veces al día, con más frecuencia de lo habitual. También puedes usar líquidos higienizantes siempre que contengan al menos un 60 % de alcohol.
- En la limpieza de superficies y objetos, puedes utilizar alcohol en más de un 60 % para garantizar que queden libres de virus. Hazlo especialmente en aquellos objetos que utilices habitualmente, como tu teléfono móvil o tu escritorio.
- El uso de máscaras se está extendiendo, aunque no está del todo claro que sean realmente efectivas, sobre todo cuando su nivel de filtrado no es lo bastante fino; por ello, es importante saber el tipo de máscara que debe ser utilizada. Si optas por utilizarlas (o pañuelos, o cualquier otro método de barrera respiratoria), éstas deberán cambiarse cada cierto tiempo (y siempre que se humedezcan) y deberás lavarte las manos antes de cambiarlas.
- Si presentas síntomas similares a los de una gripe o resfriado, o si te encuentras en un entorno en el que alguien muestre síntomas de este tipo, evita el contacto cercano (lo ideal es mantener una distancia mínima de un metro) y cúbrete en caso de que sientas ganas de estornudar o toser (si no es con una mascarilla o pañuelo, simplemente con tu mano, que deberás lavar inmediatamente después).
- Es muy importante mantener un sistema inmunológico fuerte, y ello pasa por mantener una alimentación adecuada, dormir lo suficiente, reducir el nivel de estrés... Es la mejor barrera para evitar complicaciones en caso de contagio, ya que se trata de un virus cuya tasa de mortalidad es mínima pero que, como suele ocurrir con otros virus como la gripe, puede afectar en mayor medida a personas mayores o inmunodeprimidas.
- Ante la posibilidad de que pueda transmitirse a través de la alimentación, evita el consumo de carne u otros alimentos que no estén adecuadamente cocinados si te encuentras en zonas afectadas.