Marta Bustos, la joven española de 24 años que se quemó los ojos durante un accidente doméstico con sosa caustica, recuperará la vista. “No sabemos qué % de visión ganará, pero sí que volverá a ver”, ha informado su madre Anna Góngora en ‘GoFundMe’, donde iniciaron una campaña de recaudación de fondos para pagar los tratamientos médicos de la joven ya que esta se encontraba en Seattle (EEUU) cuando ocurrió todo.
“Hoy hace justo una semana que creamos esta campaña para salvar los ojos de Marta. Han sido 7 días muy intensos, en lo que respecta a la evolución de Marta, en cómo ha ido la campaña, por los medios de comunicación, por la difusión en las redes sociales…, estamos agradecidos e impresionados por la respuesta que hemos tenido”, anunciaba Anna Góngora el 26 de junio sobre una campaña con la que pretendían recaudar 75000 euros, pero cuyas donaciones han superado ya los 245 000.
“Informamos que la campaña se cerrará el 30 de junio; ha llegado el momento de centrarnos en la recuperación de Marta”, añadía, explicando que la razón por la que se ha mantenido abierta hasta ahora es “porque esperábamos donaciones importantes que necesitaban una gestión previa por parte del donante y también porque tanto para abrirla como para cerrarla se tienen que hacer unos trámites delicados y hemos necesitado la ayuda de un asesor, para hacerlo con la mayor transparencia posible”.
Sobre la evolución de Marta Bustos hasta ahora detalla: “Marta hasta el domingo tuvo un buen equipo médico a su lado que se ha encargado de estabilizar sus ojos. Ahora le han asignado un nuevo equipo formado por 2 médicos más especializados en la materia. Este equipo le ha asegurado por primera vez que recuperará su vista. No sabemos qué % de visión ganará, pero sí que volverá a ver. Esto ha sido una inyección de energía para Marta y para todos los que la queremos y deseamos lo mejor para ella. Cuando nos lo explicaba lloraba y lloraba. Estamos muy contentos. También le han dicho que en este tipo de accidentes suele subir la presión ocular al cabo de un mes, así que tendremos que vigilar para que esto no pase y no coja ninguna infección”.
Pero esta familia, que pidió ayuda para que la joven pudiese pagar todos los tratamientos, no se olvida de agradecer lo que han recibido. Y, por ello, concluye: “Queremos hacer llegar un mensaje de agradecimiento a todas las personas que se han volcado en ayudarnos en todos los aspectos. Los amigos y la familia, como siempre, los hemos tenido cerca y no lo dudábamos. Pero nos hemos dado cuenta que hay mucha gente buena que sin conocer a Marta se ha implicado y mucho. Y respecto a algunos comentarios negativos que hemos visto por las redes, no tenemos nada que decir. Seguiremos luchando por la recuperación física y emocional de Marta”.
En un vídeo desde el Harborview Medical Center (Seattle, WA), donde está ingresada, Marta contaba su situación el 18 de junio. "El jueves 11 de junio bajé la guardia, por descuido, por accidente, por motivos con los que no quiero torturarme. Tuve un accidente con sosa caústica", relataba Marta. Este corrosivo producto le saltó a la cara, sobre todo afectando a la boca, a la nariz y a los ojos.
Le aterraba no ser capaz de pagar las facturas ya que por su situación de inmigración en EEUU contaba que no podía aspirar a un seguro médico, aunque ambién es cierto que muchos de ellos no cubren gran parte del tratamiento que necesita. "Un viaje de ambulancia son 1.500 dólares, una noche en la UCI, 4.000 dólares", ejemplificaba.
"Lo quería compartir por varias razones. Una es esta, necesitamos un montón de difusión. Quien quiera, buenamente pueda, desde 20 euros hasta 2 euros. Todo ayuda. Que no podéis donar, que no os da la gana. Difundidlo. Y que no queréis difundirlo, espero que esto os haga ver el día desde otra perspectiva", pedía, para lo que puso en marcha la campaña de GoFundMe tras ser intervenida por primera vez el 13 de junio.
Desde entonces se mostró optimista con su situación: "Estoy contenta. Ha sido como volver a nacer. Mi único hándicap ahora son mis ojos" y a pesar de que las quemaduras fueron graves, no abandonó la espernaza: "Confío en el avance de la tecnología, en el poder de la mente, en la actitud y en que también soy joven".