Minerva Mirabal (34 años) y sus hermanas, Patria (36 años) y María Teresa (25 años), iban en coche el 25 de noviembre de 1960 cuando, miembros de la policía secreta dominicana, interceptaron el coche de las tres hermanas activistas y las ahorcaron y apalearon. Después de este terrible crimen, volvieron a meter los cadáveres dentro del coche y lo lanzaron a un precipicio para que se creyese que habían perdido la vida en un accidente de tráfico.
Por este motivo, y en honor a todas las mujeres que han sufrido violencia se celebra cada 25 de noviembre el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las mujeres y se llevan a cabo por todo el mundo concentraciones y movilizaciones.
'Las mariposas', que era como se conocía a estas tres hermanas, habían nacido en una familia acomodada de República Dominicana. Las tres activistas poseían estudios universitarios, estaban casadas y tenían hijos.
La ONU estableció en 1999 que el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las mujeres se celebrase cada 25 de noviembre en honor a estas tres activistas que murieron atrozmente asesinadas, y marcaron un antes y un después en República Dominicana. Aunque la violencia contra la mujer se manifiesta no solo de forma física, sino también sexual y psicológica.
Las jóvenes ya habían sido advertidas de que el régimen del presidente Rafael Leónidas Trujillo (1930-1961) iba a matarlas. A lo que la hermana mayor, Minerva, respondió en una ocasión: "Si me matan, sacaré los brazos de la tumba y seré más fuerte". Frase que finalmente parece que se cumplió, ya que su lucha ha sido un ejemplo y un altavoz en contra de la violencia contra la mujer y en favor de sus derechos.
En lo que va de año en España, el número de mujeres asesinadas por violencia de género asciende a 37 en 2021 y a 1.112 desde 2003.
Según los datos aportados por Naciones Unidas, "casi 1 de cada 3 mujeres ha sufrido abusos a lo largo de su vida". Por ello, desde la ONU aseguran que, aunque la violencia de género es algo que está generalizado, "puede y debe prevenirse", empezando por creer a las mujeres que han sido víctimas y "adoptando enfoques integrales e inclusivos que aborden las causas fundamentales, transformen las normas sociales dañinas y empoderen a las mujeres y las niñas".